Usuarios de cigarrillos electrónicos tienen cambios de ADN igual que los fumadores tradicionales
Un nuevo estudio revela similitudes en cambios genéticos entre fumadores y usuarios de cigarrillos electrónicos, destacando riesgos potenciales para la salud
Crédito: Elena Belodedova | Shutterstock
Un reciente estudio ha puesto de relieve una alarmante similitud en los cambios genéticos observados en usuarios de cigarrillos electrónicos y fumadores tradicionales. Esta investigación, llevada a cabo por un equipo de científicos de la Universidad de Innsbruck y el University College London, ha proporcionado información crucial sobre los efectos del vapeo en la salud humana, particularmente en relación con la epigenética, el estudio de cómo los factores ambientales influyen en la actividad genética.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista Cancer Research, examinó más de 3,500 muestras de tejido de mejillas, sangre y cuello uterino de fumadores, usuarios de cigarrillos electrónicos y personas que nunca han fumado. Los resultados revelaron cambios significativos en la metilación del ADN, un proceso clave en la regulación de la expresión genética, en las células que recubren la boca de los participantes.
La Dra. Chiara Herzog, investigadora principal del estudio, explicó: “Nuestros hallazgos muestran cambios epigenómicos sustanciales en las células de la boca tanto de fumadores como de usuarios de cigarrillos electrónicos, cambios que previamente se habían asociado con el cáncer”. Estos cambios, aunque no garantizan el desarrollo de cáncer, están vinculados a programas de crecimiento celular que suelen estar activados en condiciones cancerosas.
Ian Walker, director ejecutivo de políticas de Cancer Research UK, subrayó que si bien los cigarrillos electrónicos son considerados menos dañinos que fumar, este estudio destaca que no están exentos de riesgos. “Necesitamos estudios adicionales para descubrir sus posibles impactos a largo plazo en la salud humana”, enfatizó.
Los hallazgos del estudio son especialmente relevantes en un momento en que el vapeo está en aumento. A pesar de que el Servicio Nacional de Salud (NHS) del Reino Unido reconoce que vapear es “sustancialmente menos dañino que fumar” y puede ser útil para ayudar a los fumadores a dejar el hábito, los investigadores instan a la precaución al recomendar ampliamente los cigarrillos electrónicos como herramienta para dejar de fumar.
Martin Widschwendter, otro autor principal del estudio, destacó la importancia de explorar el epigenoma para predecir la salud y la enfermedad futuras. “Nuestra investigación sugiere que los usuarios de cigarrillos electrónicos presentan cambios similares a los observados en fumadores, lo que plantea interrogantes sobre la supuesta inocuidad de estos dispositivos”, afirmó.
La Encuesta Eurobarómetro de 2021 reveló que aproximadamente el 23% de las personas mayores de 15 años en la Unión Europea admitieron ser fumadores, mientras que más de una de cada siete personas había probado los cigarrillos electrónicos. Si bien el tabaquismo ha disminuido en la UE y el Reino Unido en los últimos años, el aumento en el uso de cigarrillos electrónicos plantea nuevas preocupaciones sobre la salud pública.
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