Mujer de 85 años en Idaho mató a tiros a un intruso en su casa: “Es un acto de autodefensa heroíco”
El fiscal del condado de Bingham, Ryan Jolley, dijo en una revisión del caso que la mujer, identificada el miércoles como Christine Jenneiahn, actuó en defensa propia y dictaminó que se trataba de un caso de homicidio justificable
La mujer arrastró la silla de madera a la que estaba esposada hasta su dormitorio y agarró su revólver Magnum .357 de debajo de la almohada. Crédito: Shutterstock
Autoridades informaron que una mujer de 85 años de Idaho mató a tiros a un intruso en su casa, un incidente al que el fiscal del condado llamó “uno de los actos de autodefensa más heroicos de los que jamás haya oído hablar”.
El fiscal del condado de Bingham, Ryan Jolley, dijo en una revisión del caso que la mujer, identificada el miércoles como Christine Jenneiahn, actuó en defensa propia y dictaminó que se trataba de un caso de homicidio justificable.
“Que Christine haya sobrevivido a este encuentro es realmente increíble. Su valor, determinación y ganas de vivir parecen ser lo que la salvó esa noche”, escribió Jolley en la revisión publicada en Facebook por la Oficina del Sheriff del condado de Bingham.
Un intruso, identificado como Derek Condon, irrumpió en la casa de Jenneiahn alrededor de las 2 am del 13 de marzo. La mujer dijo a los fiscales que estaba dormida en su casa del condado de Bingham cuando la despertó un hombre que vestía una chaqueta militar y un pasamontañas negro y le apuntaba con un arma y una linterna.
De acuerdo con la evidencia encontrada y el testimonio de la mujer, Condon golpeó en la cabeza a Jenneiahn y le dejó una herida.
Luego, Condon llevó Jenneiahn a la sala de estar a punta de pistola, mientras que el hijo discapacitado de la mujer también se encontraba en la casa. Allí, la esposó a una silla de madera y le preguntó por sus objetos de valor. Cuando ella dijo que no tenía mucho, él le puso su arma en la cabeza, según la reseña.
Jenneiahn le dijo a Condon que tenía dos cajas fuertes abajo, por lo que el hombre la dejó esposada en la sala de estar mientras recorría varias habitaciones de su casa en busca de sus objetos de valor, dijeron los fiscales.
“En algún momento, descubrió que el hijo de Christine también estaba en la casa y se enojó con Christine por no decírselo”, de acuerdo con el documento.
Condon comenzó a hacer numerosas amenazas de que quería matar a Jenneiahn, por lo que en un momento en que el hombre se fue de la habitación la mujer arrastró la silla de madera a la que estaba esposada hasta su dormitorio y agarró su revólver Magnum .357 de debajo de la almohada, dice la reseña.
De vuelta en la sala de estar, Jenneiahn escondió el arma entre el apoyabrazos y un cojín mientras “esperaba a ver qué hacía Condon a continuación”.
“El recuerdo de Christine de lo que ocurrió exactamente a continuación sigue siendo algo confuso”, según la reseña.
Jenneiahn dijo a los fiscales que en algún momento, cuando Condon regresó a la sala de estar después de haber hurgado en su casa, volvió a amenazarla con matarla. “Finalmente tomó la decisión de que era ‘ahora o nunca’ y sacó su magnum 357 oculta y se enfrentó a Condon, golpeándolo con ambos disparos”, dice la reseña.
Condon respondió al fuego, golpeando a Jenneiahn varias veces en el abdomen, una pierna, un brazo y el pecho con una pistola de 9 mm. Luego el hombre fue a la cocina, donde murió a causa de las heridas de bala.
Jenneiahn, todavía esposada, se cayó y permaneció en el suelo durante aproximadamente 10 horas hasta que su hijo subió a última hora de la mañana y le dio un teléfono para llamar al 911. Los agentes respondieron alrededor de las 12:17 p.m., dice la revisión.
El medio EastIdahoNews.com informó que Jenneiahn fue llevada al Centro Médico Regional del Este de Idaho en Idaho Falls. Ha sido dada de alta y se está recuperando.
La investigación posterior encontró una ventana rota en la parte trasera de la residencia y un destornillador cerca de donde entró Condon. En su cuerpo, el hombre tenía un juego de ganzúas, la llave de su auto, una llave de esposas y una bolsa llena de artículos robados de la casa.
El auto de Condon también fue encontrado cerca de la casa, según la revisión, y se descubrió un conjunto de huellas que iban desde el vehículo en dirección a la casa.
Con base en la ley de autodefensa de Idaho, que establece que “ninguna persona en este estado deberá correr peligro legal de ningún tipo por protegerse a sí misma”, Jolley dictaminó que el asesinato era justificable.
“Este caso presenta un análisis sencillo de defensa propia y homicidio justificable. También presenta uno de los actos de autoconservación más heroicos de los que jamás haya oído hablar”, escribió Jolley.
Añadió: “A falta de un intento claro por parte de Condon de retirarse de la residencia o rendirse, lo que según las pruebas claramente no ocurrió, Christine estaba justificada al tomar todos los medios necesarios para defenderse a sí misma y a su hijo esa noche”.
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