¡Entreguen el dinero! 

Gerentes de tiendas 7-Eleven aconsejan a sus empleados no confrontar a ladrones armados; la ola de robos contra estas tiendas no para; hay tres arrestados con cargos federales 

Las tiendas 7-Eleven sigun siendo objeto de robos.

Las tiendas 7-Eleven sigun siendo objeto de robos. Crédito: JORGE LUIS MACÍAS | Impremedia

“Entreguen el dinero” es el consejo más importante que Ron le ha dado a sus empleados en la tienda 7-Eleven que se ubica en la intersección del bulevar San Gabriel y la avenida Hellman, en la ciudad de San Gabriel, a sabiendas de la ola de robos que se están cometiendo contra estas tiendas. 

El atraco más reciente ocurrió el miércoles en la ciudad de Duarte, a la 1:30 de la madrugada en la tienda 7-Eleven de la cuadra 1800 de Huntington Drive. 

El sospechoso, que portaba una máscara y guantes negros sigue prófugo y se escapó con $300 dólares en efectivo, según las autoridades. 

Sin embargo, desde las 9:30 de la noche del sábado pasado y las 4:00 a.m. del domingo ocurrieron nueve robos en los condados de Orange y Los Ángeles. 

Tres de los asaltos ocurrieron en negocios de Long Beach, dos en Lakewood y uno en Bellflower. 

“En esta última ola de robos no ha habido detenidos”, dijo Miguel Meza, portavoz del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles. 

Meza precisó que, si bien no hay protocolos de seguridad, ellos brindan consejos a los gerentes, empleados y propietarios de los negocios para poder minimizar las consecuencias de un robo. 

“Les pedimos que pongan cámaras de video y que iluminen el área alrededor de las tiendas para identificar más fácilmente a los ladrones”, dijo. “También les pedimos que, en las cajas registradoras tengan el mínimo de dinero en efectivo”. 

Lo que es vital, añadió, es nunca confrontar a los ladrones. 

Waldemar Galindo cajero de una tienda.
Crédito: Impremedia

“La vida, siempre es más importante y no queremos que nadie resulte lastimado”, declaró Miguel Meza. “Si les piden dinero, entréguenselos; no traten de creerse valientes, sino traten de ser el mejor testigo para que nos ayuden a identificar a los ladrones”. 

Waldemar Galindo, empleado guatemalteco de una tienda de conveniencia en Pasadena, dijo a La Opinión que varias veces a la semana le toca cerrar las cortinas del negocio y sabe cuándo algunas personas que se quieren hacer pasar como clientes llegan con la intención de robar 

“Todos estos robos son parte de un problema social; hay muchas personas en la calle que no tienen trabajo y el Estado debería hacer algo para solucionar este problema, porque los ladrones saben hasta donde pueden robar, salir libres fácilmente y sin ningún castigo”. 

Robos conectados entre sí 

En el condado de Orange, se reportaron hurtos en Orange, Anaheim y Fullerton. 

En cada uno de los incidentes los ladrones entraron a las tiendas 7-Eleven y se robaron el dinero en efectivo y huyeron en una camioneta SUV de color oscuro. 

El primer ataque de los ladrones ocurrió a las 10:00 de la noche en un 7-Eleven de la calle East, en Anaheim; el segundo ocurrió 20 minutos después en una gasolinera Shell de la avenida La Palma y el tercero aconteció pocos minutos después en un negocio Circle K, en la avenida Riverdale.  

Minutos antes se reportó un robo en la calle Glassell, en Orange, y uno más, en la tienda 7-Eleven de la avenida Orangethorpe, en Fullerton. Tres ladrones están en custodia de la policía. 

“Creemos que los tres robos de la noche del 19 de mayo y la madrugada del día 20 están conectados a otros robos en otras jurisdicciones”, declaró el sargento Jonathan McClintock, a La Opinión. “En la tarde del 20 de mayo de 2024, agentes del LASD se involucraron en la persecución de un vehículo que se cree era el que usaban para cometer los robos”. 

 McClintock expresó que las investigaciones continúan y siguen trabajando con otras agencias del orden, y solicitó que cualquier información relacionada a los robos, se puede denunciar de forma anónima a la policía de Anaheim, llamando al (714) 765-1900 o reportar la información a Orange County Crime Stoppers. 

Enfrentan cargos federales 

Antonio Bland, de 34 años, residente de North Hollywood ha sido acusado en una denuncia penal federal por intento de robo a mano armada en un negocio de venta de donas en Downey. 

Bland y dos cómplices más que fueron arrestados, Ronnie Tucker, de 22 años, de Long Beach, y Abigail Lucey, de 49 años, también de North Hollywood eran parte de una banda de ladrones que atacó en 11 negocios: una tienda de tabaco en la ciudad de Tustin, en el condado de Orange y nueve tiendas 7-Eleven en North Hollywood, Burbank, Torrance, Van Nuys, Long Beach, Glendale, Pasadena y una tienda de donas en Downey. Los robos ocurrieron entre el 29 de enero y el 14 de febrero. 

Antonio Bland se presentó el miércoles en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos en Los Ángeles, donde se ordenó su encarcelamiento sin derecho a fianza. La lectura de cargos en su contra está prevista para el 10 de junio, dijo a La Opinión, Ciaran McEvoy, portavoz de la Fiscalía Federal del Distrito Central de California. 

La probable sentencia 

Tanto a Bland como Tucker y Lucey se les aplicaría la Ley Hobbs, sobre la base de intento de interferencia con el comercio mediante robo. 

Según la Comisión de Sentencias de los Estados Unidos, tanto los intentos como la conspiración para cometer un robo según la Ley Hobbs se castigan con la misma pena máxima de prisión de no más de 20 años que para un robo sustancial. 

“Hemos visto demasiados delitos violentos con armas de fuego en nuestra comunidad y esto tiene que parar”, dijo el fiscal federal Martín Estrada. “Nuestra iniciativa Operación Ciudades Seguras tiene como objetivo hacer precisamente eso. Los delincuentes violentos deben prestar atención a que los socios federales y locales están colaborando más que nunca para garantizar que haya consecuencias para quienes participan en delitos con armas de fuego”. 

Krysti Hawkins, subdirectora interina a cargo de la oficina local del FBI en Los Ángeles, dijo que Bland y sus cómplices emprendieron una misión para robar violentamente a empleados de pequeñas empresas en Los Ángeles y sus alrededores. 

Buscan a la fugitiva 

En este caso, se espera que Ronnie Tucker, de 22 años, de Long Beach, sea transferido a custodia federal en las próximas semanas, mientras Abigail Luckey, quien fue la presunta conductora de la fuga en el robo del 14 de febrero en la tienda de donas de Downey, no ha sido capturada. 

A Luckey se le otorgó libertad bajo fianza en un tribunal estatal, pero desde febrero entonces no ha comparecido ante el tribunal y se la considera fugitiva. 

“Cualquier persona que tenga información sobre el paradero de la fugitiva Abigail Luckey debe comunicarse con el FBI”, dijo Krysti Hawkins. 

Los crímenes cometidos por el trio de ladrones ocurrían generalmente a altas horas de la noche e involucraban a dos hombres que ingresaban a cada negocio con sudaderas con capucha y máscaras faciales. En varios de los robos, la conductora que se dio a la fuga esperaba afuera a que los sujetos completaran el robo. 

“¡Abran la caja registradora!” gritó uno de los ladrones el 14 de febrero en el negocio de donas, donde un empleado observó que estaban armados y corrió hacia la cocina. 

Los sujetos saltaron el mostrador y lo persiguieron, pero el empleado sacó su propia arma y disparó al aire. Ese movimiento sirvió para los delincuentes huyeran. Posteriormente fueron arrestados y la policía recuperó un arma. 

“En casos anteriores también hemos buscado aplicar cargos federales a ladrones”, dijo Ciaran McEvoy. “A veces, son los mismos fiscales de distrito de los condados quienes nos piden intervenir”. 

Los fiscales federales adjuntos J’me K. Forrest de la Sección de Crimen Organizado y Violento y Diane Roldán de la Sección de Delitos Generales están procesando este caso. 

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