Robot realiza cirugía cerebral a niña de Oklahoma, la primera en la historia
Una niña de ocho años con daño cerebral paralizante recuperó la capacidad de moverse por sí sola, gracias a una cirugía de implante, la primera de su tipo, que involucró a un robot
El primer procedimiento robótico de estimulación cerebral profunda (DBS) del mundo en un paciente pediátrico culminó con éxito para Karleigh Fry, de 8 años, quien se recupera en el Oklahoma Children’s Hospital OU Health.
La tecnología que hoy en día es parte de nuestra vida, nos ofrece grandes bondades en todos los ámbitos, en esta ocasión, una pequeña de Oklahoma fue testigo de estas innovaciones, convirtiéndose en la primer infante en el mundo atendida por un robot para una afección cerebral.
Karleigh Fry, de 8 años, padecía de distonía primaria de aparición rápida, un trastorno neurológico que provoca movimientos musculares involuntarios, y a la vez, la mantenía paralizada sin poder caminar, comer o sentarse por sí sola.
Está afección puso a Fry bajo los reflectores de un grupo médico del Oklahoma Children’s Hospital OU Health y el Bethany Children’s Health Center quienes comenzaron a explorar las opciones viables para devolverle la movilidad.
Los especialistas decidieron aplicar en Fry el procedimiento robótico de estimulación cerebral profunda (DBS) el primero del mundo en un paciente pediátrico.
“Esto marcó el debut mundial del uso de un robot de nuestros quirófanos para realizar DBS en un niño, sentando un precedente no sólo en Oklahoma sino también en todo Estados Unidos y en todo el mundo”, dijo el Dr. Andrew Jea, MD, neurocirujano pediátrico del Oklahoma Children’s Hospital.
La DBS, una técnica quirúrgica que implica la implantación de electrodos en regiones específicas del cerebro, se ha utilizado tradicionalmente para tratar trastornos del movimiento como la enfermedad de Parkinson, el temblor esencial y la distonía.
Este procedimiento y el dispositivo en particular nunca se habían realizado de forma robótica en pacientes pediátricos hasta ahora. El uso de la robótica mejora la precisión quirúrgica y la seguridad del procedimiento y, al mismo tiempo, abre nuevas posibilidades para mejorar los resultados de los pacientes.
Debido a su enfermedad, Karleigh Fry estaba paralizada y no podía comer, caminar ni siquiera sentarse por sí sola. Ahora puede levantar los brazos por encima de la cabeza y hay señales de que está empezando a mover otras partes del cuerpo.
La forma de distonía que tiene la señora Fry es el tipo genético que es menos común en los niños. La causa más común en los niños es una lesión cerebral, como un derrame cerebral o una parálisis cerebral.
La Dra. Amber Stocco, neuróloga pediátrica involucrada en el procedimiento, describió la cirugía como un “hito”.
“Nuestra joven paciente ya está mostrando resultados prometedores y esperamos que este procedimiento allane el camino para más casos pediátricos en todo el mundo”, explicó.
Los electrodos estimulantes insertados en su cerebro ayudaron a interferir con la actividad anormal, restaurando los patrones de movimiento normales.
El dispositivo, llamado implante de estimulación cerebral profunda, es similar a un marcapasos, pero para el cerebro.
La herramienta también se utiliza para tratar la enfermedad de Parkinson, los temblores, la epilepsia, el trastorno obsesivo compulsivo y la deepresión.
Cabe mencionar que, si bien la cirugía robótica no es un método nuevo, pues el robot Da Vinci es utilizado a menudo para cirugía cardíaca y torácica, desde el año 2000 y se ha utilizado en bebés, esta intervención sí marca un momento histórico.
“Esto marcó el debut mundial del uso de un robot de nuestros quirófanos para realizar estimulación cerebral profunda en un niño, sentando un precedente no sólo en Oklahoma sino también en todo Estados Unidos y el resto del mundo”, sentenció Andrew Jea.
Después de que se activó el neuroestimulador, se mencionó que Fry pudo bajar y relajar los brazos en cuestión de minutos, algo que no podía hacer antes del procedimiento, pero será con el paso del tiempo cuando se descubre su nivel total de recuperación.
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