Enfermeros del futuro: estudiantes de preparatoria en LA consiguen oportunidad de empleo en prestigioso hospital
En el hospital Cedars-Sinai se gradúan 13 estudiantes de Fairfax High School que van a la universidad para convertirse en trabajadores de la salud
Con algarabía en sus rostros y las esperanzas puestas en un mejor futuro para sí mismos, estudiantes de Fairfax High School recién graduados serán parte del programa de tutoría educativa del prestigioso centro hospitalario Cedars-Sinai.
La graduación fue apenas el comienzo, no el final de las carreras de los estudiantes que son parte del Programa de Empleo y Desarrollo Juvenil (YED) de Cedars-Sinai, que fue fundado en 1993.
Dicho programa es una colaboración entre Cedars-Sinai y la secundaria Fairfax High School de Los Ángeles, que involucra a estudiantes de 11º y 12º grado a través de educación escolar, aprendizaje práctico en el lugar de trabajo y tutoría.
Quiere cumplir su meta de ser enfermero
A pesar de que no fue escogido para ser parte de un trabajo remunerado a tiempo parcial, Bladimir González, de 18 años e hijo de los inmigrantes salvadoreños Brenda Salguero y Eduardo González, ambos del Departamento La Libertad sus planes para llegar a ser un enfermero no se detienen.
En el otoño irá a Los Angeles City College, y de ahí se quiere transferir a la Universidad de California Los Ángeles (UCLA).
“Quiero ser enfermero porque yo he visto cómo las enfermeras atienden a mi hermanito (Daniel, de 12 años)”, dijo Bladimir. “Yo también quiero ser parte de su cuidado, y para cuidar a otros niños”.
El niño Daniel González nació con hidrocefalia, una dilatación anormal de los ventrículos del encéfalo por acumulación excesiva de líquido cefalorraquídeo en el cerebro.
Bladimir comentó a La Opinión que, a los 14 años se dio cuenta que quería trabajar en un hospital cuando fuera grande.
A partir del 26 de agosto cursará dos años gratis de colegio en LACC.
“Yo me siento muy orgullosa de mi hijo”, dijo la señora Brenda Salguero, quien realiza faenas de limpieza en una clínica médica. “Él [Bladimir] ha hecho grandes esfuerzos por sus estudios y siempre ha querido sobresalir; no tengo la menor duda de que va a triunfar en la vida y se graduará de enfermero”.
Excelentes oportunidades educativas y de desarrollo
Cada año, los estudiantes matriculados de Fairfax High School acceden a trabajos remunerados a tiempo parcial en Cedars-Sinai en un área de su interés, así como a la oportunidad de aprender de mentores profesionales y obtener créditos para graduarse.
Desde el comienzo del programa, más de 1,000 estudiantes se han matriculado a través del programa YED, y muchos de ellos se convirtieron en empleados de tiempo completo de Cedars-Sinai como Daniela Villegas, gerente de programas y asistente de reclutamiento de Recursos Humanos en el hospital.
Ella tenía 16 años en 2003 y su hermana era parte del programa YED.
“Mi hermana era parte del programa y yo tenía 16 años”, dijo Daniela. “Ella me preguntó ¿Sabes qué vas a hacer con tu vida? Tienes que aplicar al programa y mira las opciones que tienes en este programa”.
La ilusión de Daniela era ser enfermera. Hizo interinatos en el departamento de ginecología porque ama a los niños, pero al año siguiente estuvo en Recursos Humanos, y allí descubrió su verdadera vocación.
A través de los años, Cedars-Sinai le ofreció un empleo de tiempo completo, pero con la condición de que fuera a la universidad, mientras trabajaba.
Daniela se casó joven; tiene un hijo de 12 años, y a sus 37 años aún sigue estudiando porque quiere obtener su título universitario en Recursos Humanos.
“Nunca es tarde para acabar la educación y seguir avanzando en tu carrera”, afirmó. “Los latinos necesitamos solamente una oportunidad para demostrar de lo que somos capaces”.
Diversidad para Cedars-Sinai
Nicole Mitchell, directora de Diversidad e inclusión de Cedars-Sinai destacó que, para el hospital ambas premisas son vitales, “pensando en los pacientes a los que atendemos”.
“Nuestros pacientes provienen de diferentes orígenes, y queremos asegurarnos de que nuestra fuerza laboral y la próxima generación de profesionales de la salud reflejan la comunidad a la que servimos”, afirmó. “Todo lo que está en la mesa del programa YED está sobre la mesa; los jóvenes hablan distintos idiomas y sabemos que muchos de los estudiantes son latinos y queremos ayudarlos a lograr sus sueños”.
Mitchell subrayó que “sería fantástico” si todos los hospitales proporcionaran oportunidades de desarrollo profesional para los estudiantes como lo hace Cedars-Sinai, particularmente entre las comunidades más desfavorecidas.
“Sería increíble si todos hiciéramos eso, juntos”, dijo. “Ese es mi sueño…sabiendo que estamos viendo un cambio en la demografía en los Estados Unidos, y necesitamos pensar cómo podemos asegurarnos de apoyar a esa generación de estudiantes”.
Faltan miles de enfermeros
Nicole Mitchell declaró que, programas como YED y NextGen de Cedars-Sinai, son fundamentales para el futuro de la enfermería y la atención médica.
“No solo garantizan que nuestros enfermeros reflejen la diversidad de nuestros pacientes y nuestra comunidad, sino que mejoran fundamentalmente la calidad y la empatía de la atención que brindamos”, destacó.
“Al establecer estas vías y programas, garantizamos una atención culturalmente competente y compasiva para nuestros pacientes y toda la comunidad”.
En efecto, además de colaborar para la diversidad cultural en el campo médico, los esfuerzos de Cedars-Sinai ayudan a reducir la presión sobre el número de enfermeras en los hospitales.
Las estimaciones muestran que California enfrenta una escasez de alrededor de 36,000 enfermeros autorizados, según el Centro de Investigación de la Fuerza Laboral de Salud sobre Atención a Largo Plazo de la UC San Francisco.
El impacto de Andrea Perry
Un año después de que los disturbios de 1992 sacudieran Los Ángeles, Cedars-Sinai lanzó el programa Empleo y Desarrollo Juvenil (YED) para brindar inspiración a los jóvenes desfavorecidos de la ciudad y una visión reveladora de las oportunidades profesionales.
Conocido como Empleo y Desarrollo Juvenil (YED), el programa que ha dirigido Andrea Perry, por más de tres décadas sigue atrayendo a los jóvenes, sabiendo que se lanzó en medio de preocupaciones en Los Ángeles sobre la injusticia racial, social y económica.
El premio “Andrea Perry” fue otorgado este año a Emily Choi.
Pediatra o anestesióloga
Acompañada de su madre, Erika Mendoza, Jackie Hernández, de 18 años contó a La Opinión que quiere ser una enfermera en pediatría o anestesiología.
“Voy a estudiar en Mount St. Mary University y espero con ansias llegar a graduarme como enfermera”, dijo Jackie, a quien su madre la define como una chica “llena de valores, que es muy inteligente y respeta a todos”.
Por su parte, Arlene Herrera, de 18 años también dio a conocer que su meta es graduarse como enfermera.
“Quiero ser enfermera solo porque quiero poder escribir en el diario de la vida de otra persona, quiero hacerlos sentir mejor y en sus momentos débiles quiero darles algo de ayuda y compasión en su dolor”, dijo.
Arlene planea acudir al Santa Monica Community College por dos años y posiblemente transferirse después a una universidad.
“Aunque la carrera es difícil, siempre he sido una persona compasiva con los demás; siempre antepongo a los demás, antes que a mí misma”, añadió. “Soy muy consciente de lo que me rodea. Siempre he tenido buenos hábitos y ética de trabajo y siempre me ha gustado esforzarme por ser la mejor”.
Creación de un nuevo programa
Durante el festejo que se llevó a cabo en el Thalians Health Center Auditorium, Andy Ortiz, vicepresidente senior de Recursos Humanos de Cedars-Sinai dio a conocer que muy pronto se pondrá en marcha el nuevo programa llamado “Mentoría Educativa para Potenciar el Crecimiento Resiliente y la Excelencia en la Atención de la Salud (EMERGE)
“EMERGE ofrecerá una oportunidad para que los graduados del Programa de Empleo y Desarrollo Juvenil (YED) mantengan su empleo mientras cursan estudios superiores”, dijo Ortiz.