Microsoft le está exigiendo a sus empleados que utilicen iPhones

En un movimiento estratégico para reforzar la seguridad cibernética, Microsoft ha comunicado a sus empleados en China que, a partir de septiembre, deberán utilizar exclusivamente iPhones para sus actividades laborales, eliminando de este modo el uso de dispositivos con sistema operativo Android. Esta decisión forma parte de un esfuerzo más amplio de la compañía para proteger sus productos y servicios contra amenazas cibernéticas.

Razones de seguridad detrás de la decisión

Según un memorando interno revisado por Bloomberg News, Microsoft está implementando esta medida como parte de su Iniciativa de Futuro Seguro (Secure Future Initiative, SFI). Este programa tiene como objetivo principal reforzar la seguridad después de repetidos ataques por parte de hackers patrocinados por estados, siendo uno de los incidentes más destacados un ataque vinculado a Rusia que afectó a varias agencias gubernamentales de Estados Unidos en enero.

La medida afecta a cientos de empleados en toda China continental y está diseñada para garantizar que todo el personal utilice la aplicación Microsoft Authenticator y la aplicación de gestión de identidades Identity Pass. Debido a la falta de servicios móviles de Google en China, los dispositivos Android no pueden acceder a Google Play Store, lo que deja a la App Store de Apple como la única opción viable para descargar estas aplicaciones de seguridad necesarias.

Un portavoz de Microsoft comentó en un comunicado por correo electrónico: “Debido a la falta de disponibilidad de Google Mobile Services en esta región, buscamos ofrecer a los empleados un medio para acceder a estas aplicaciones necesarias, como un dispositivo iOS”. Como parte de esta transición, cualquier empleado que utilice un teléfono Android recibirá un iPhone 15, que podrá recoger en varios centros de distribución en China, incluyendo Hong Kong.

Android vs. iPhone: Enfoque en la seguridad

La elección de iPhones sobre dispositivos Android no es arbitraria. Los teléfonos Android, aunque populares y versátiles, presentan ciertos desafíos en términos de seguridad, especialmente en un entorno tan sensible como el de las operaciones corporativas en China. 

La fragmentación de las tiendas de aplicaciones de Android en China es un factor crítico. Mientras que Google Play no está disponible, fabricantes locales como Huawei y Xiaomi operan sus propias plataformas, lo que genera una inconsistencia en los estándares de seguridad y en las actualizaciones de software.

Los iPhones están sujetos a un control más riguroso de Apple en cuanto a la seguridad y la integridad de sus aplicaciones. La App Store de Apple tiene procesos de revisión más estrictos que las tiendas de aplicaciones de Android, lo que reduce el riesgo de que aplicaciones maliciosas o no verificadas puedan instalarse en los dispositivos de los empleados. Además, los iPhones reciben actualizaciones de seguridad directas y regulares de Apple, lo que asegura que los dispositivos estén protegidos contra las últimas amenazas cibernéticas.

Esta decisión también subraya la creciente divergencia entre los ecosistemas móviles chinos y extranjeros. Con la ausencia de los servicios móviles de Google, las aplicaciones de seguridad críticas de Microsoft no pueden ser implementadas de manera efectiva en dispositivos Android dentro de China, dejando a los iPhones como la única alternativa viable para mantener un alto nivel de seguridad corporativa.

Seguridad Corporativa

El cambio a iPhones por parte de Microsoft podría atraer la atención sobre la delicada situación de los dispositivos móviles extranjeros en China, especialmente en un momento en que las tensiones geopolíticas entre Beijing y Washington están en aumento. 

Desde 2023, varias empresas y agencias respaldadas por el gobierno chino han ordenado a su personal que deje de llevar dispositivos extranjeros al trabajo, citando preocupaciones de seguridad.

Esta nueva política de Microsoft no solo refuerza la seguridad de sus operaciones en China, sino que también es una respuesta a la presión y las críticas de los legisladores estadounidenses para mejorar su desempeño en ciberseguridad. 

La SFI, lanzada en noviembre pasado, es el esfuerzo de seguridad más ambicioso de Microsoft en dos décadas. Además del uso de iPhones, Microsoft planea utilizar inteligencia artificial y otros métodos para abordar más rápidamente las vulnerabilidades en la nube, dificultar el robo de credenciales y aplicar automáticamente la autenticación multifactorial para sus empleados.

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