‘Mickey no aceptaría un salario bajo’, dicen empleados de Disneyland

Poco más de 1,000 trabajadores del elenco de Disney se vistieron como los personajes del centro temático en Anaheim, protestaron por presuntas violaciones a las leyes laborales y se declararon listos para votar el viernes para irse a la huelga y para rechazar cualquier oferta salarial que provenga de la compañía.

Miembros de los sindicatos Master Services Agreement, Bakery, Confectionery, Tobacco Workers and Grain Millers (BCTGM), Service Employees International Union-United Service Workers West (SEIU-USWW), Teamsters Local 495 y United Food and Commercial Workers (UFCW) Local 324 presentaron cargos por prácticas laborales injustas contra Disney.

Lo hicieron en nombre de 14,000 miembros del Disney Resort por actos de indisciplina ilegal, intimidación y vigilancia en contra de 550 trabajadores de los sindicatos que han ejercido su derecho a usar botones del gremio en el trabajo. Los cargos son investigados por agentes de la Junta Nacional de Relaciones Laborales.

“Los miembros del elenco han estado en la mesa de negociaciones durante meses tratando de ganar un contrato justo porque merecemos más, pero la compañía ha estado ocupada violando la ley, vigilando, intimidando y disciplinando a los miembros del elenco por ejercer sus derechos”, dijo Michi Cordell, una “Aprendiz del Hada Madrina” (Fairy Godmother’s Apprentice) en Bibbidi Bobbidi Boutique en Disneyland.

“Estas prácticas laborales injustas están obstaculizando nuestra capacidad de obtener el contrato justo que merecemos. Disney debe rendir cuentas y evitar amenazas contra nosotros, los miembros del elenco que hacen magia a diario para los visitantes”.

La Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó en 1945 que el derecho de los empleados a usar insignias sindicales en el trabajo es una forma razonable y legítima de actividad sindical, y la restricción de ese derecho por parte del empleador es claramente una violación laboral.

La ley indica que los empleadores no pueden prohibir legalmente los botones sindicales por violar un código de vestimenta o porque los empleados deban usar uniforme u otra vestimenta designada.

De manera similar, el hecho de que los empleados interactúen regularmente con los clientes no justifica prohibir o restringir los botones sindicales en las áreas de trabajo, dijo un líder sindical que prefirió no dar su nombre.

“Pago justo, muestra tu caso”, “Disney no seas el villano”, “Mickey no aceptaría un salario bajo”, “No puedo pagar mis facturas”, “Los miembros del elenco merecen un sueldo digno”, fueron apenas algunos de los numerosos mensajes en pancartas, por parte de los empleados de Disney.

Protestan trabajadoras latinas

Entre la ruidosa protesta frente a Disney Way y el bulevar Harbor, en Anaheim, Jenny Cristales, de 44 años e hija de padres salvadoreños que trabaja en Candy Palace desde hace cinco años, dijo a La Opinión que una amiga suya fue intimidada por un supervisor, por haber portado una insignia sindical.

“Ella quiso llorar cuando le dijeron que se quitara la pegatina; yo le dije que no había hecho nada malo , pero el mánager amenazó que la iba a disciplinar y ponerlo en su récord”, explicó. “A ella le dio miedo y se quitó la pegatina”.

Madre de cuatro hijos y residente en Baldwin Park, la señora Cristales dijo que ella está dispuesta a votar en favor de la huelga “porque no podemos seguir viviendo con los sueldos que tenemos”.

Ella gana $19.90 la hora y los sindicatos están peleando porque se les pague entre $28 y $29 la hora.

 “Apenas salimos adelante con las taquizas que preparamos con mi esposo [Enrique Carrillo]”, dijo Jenny. “Pero ya no podemos pagar los $3,200 mensuales de renta de la casa unifamiliar donde vivimos en Baldwin Park”.

El probable paro laboral de los trabajadores afectaría al elenco de Disneyland, en Disney California Adventure, Downtown Disney y los hoteles de Disney.

De igual manera, María Elena Román, una michoacana de 60 años, quien desde hace tres años recibe a los turistas a la entrada de Disney, expresó que esta “100% a favor de la huelga”.

“Estamos pidiendo $6.00 de aumento y un contrato de tres años”, manifestó Rosy Noroña, integrante del equipo negociador de un nuevo pacto laboral con Disney. “Lo que nos ofrecen son $22.65, y eso no será suficiente, es decir, nos quieren dar apenas $0.50 centavos”.

Negociaciones sin avance

La unidad de negociación de los trabajadores de Disney en California, compuesta por conserjes y operadores de atracciones, fabricantes de dulces y empleados de mercancías, inició las pláticas con la compañía desde el 24 de abril.

Los trabajadores indicaron que, desde esa fecha, Disney ha obstaculizado repetidamente todos los esfuerzos para llegar a un nuevo contrato que compense su trabajo.

“Como está de cara la gasolina, la comida y la inflación, el dinero no me alcanza para nada”, afirmó Mirna Crisanto, quien lleva seis años trabajando para Disney. “Por suerte todavía vivo con mis padres, a quienes les pago $325 de renta mensual; de otra manera seria imposible sobrevivir”.

Si bien Disneyland se autodenomina “El lugar más feliz de la Tierra”, la realidad para los empleados del parque es de dificultades económicas.

“No estaremos votando sobre el contrato actual. Votaremos sólo sobre la violación de la huelga por prácticas laborales injustas, porque las acciones de Disney nos impiden obtener el contrato que los miembros del elenco necesitan”, dijo a La Opinión, Jenna Thompson, portavoz del Sindicato de Trabajadores de Alimentos y Comercio (UFCW Local 324).

Thompson añadió que “una huelga es siempre nuestro último recurso, pero por lo que he visto, los miembros del elenco están listos y dispuestos a hacer lo que necesiten para conseguir el contrato que merecen”.

No ganan suficiente

Los miembros del elenco que hacen posible las ganancias de Disney reportaron que el 73% de ellos no ganan suficiente dinero para cubrir los gastos básicos cada mes.

“Ni siquiera puedo alimentar a mi familia”, declaró Delia Uyl, una mujer filipina que vive en Lakewood.

De hecho, una encuesta entre miembros del elenco de este año encontró que, casi tres de cada 10 miembros del elenco (28%) informan que experimentan inseguridad alimentaria; el 64% gastan más de la mitad de sus sueldos mensuales en alquiler o sufren esa carga.

Además, el 33% de los miembros del elenco de Disney experimentaron inseguridad habitacional el año pasado y 42% de ellos tuvieron que faltar al trabajo para recibir tratamiento médico porque no tenían suficientes días de baja por enfermedad.

Los trabajadores no están convencidos de los aumentos salariales que se les ofrece: de $19.90 a $22.00, y un incremento de $0.50 para empleados que tengan señoría en Disney, es decir, aquellos que tienen más de 20 o 30 años con la empresa multimillonaria.

En efecto, Disney Parks publico sus ganancias de $8,300 millones del cuarto trimestre de 2023 y de todo el año, registrando un récord de $32,500 millones en ingresos para ese año fiscal  que finalizó el 30 de septiembre.

“Las negociaciones no van bien. Esa es una de las razones por las que vamos a realizar esta votación de huelga el viernes”, dijo Jenna Thompson.

Preparados para una huelga

Con la manifestación planeada de antemano, “seguimos centrados en el bienestar de nuestros invitados y miembros del elenco”, dijeron oficiales de Disneyland Resort, en un comunicado.

“Seguimos comprometidos con las próximas reuniones del 22 y 23 de julio para llegar a un acuerdo con Master Services [los sindicatos] que se centren en lo que más importa a los miembros del elenco, posicione a Disneyland Resort para el crecimiento, la creación de empleos y nos permita continuar brindando increíbles experiencias a los huéspedes”.

De igual manera, representantes de Disney aseguraron a La Opinión que, como en todas sus negociaciones sindicales, Disneyland Park cuenta con planes que les permitiría continuar brindando el nivel de servicio que los visitantes esperan de ellos.

“Disney California Adventure Park y los hoteles de Disneyland Resort no se verían afectados por una huelga”, expresaron.