Aumentan muertes por calor extremo en Estados Unidos
Un trabajador agrícola sufrió un golpe de calor mortal, reflejo de cómo el calentamiento global impacta la salud humana
Las consecuencias más graves de las olas de calor pueden ser las fallas de diferentes órganos como el cerebro, los riñones y el corazón. Crédito: Pheelings media | Shutterstock
Un hombre joven y saludable, trabajador agrícola, cayó inconsciente en un campo debido a un golpe de calor severo. Fue llevado de urgencia al hospital, donde su temperatura corporal alcanzaba los 40 grados Celsius.
No presentaba signos de infección ni cáncer oculto, sino algo mucho más insidioso que afecta a todos: el calor extremo. Este incidente reseñado por el propio Dr. Thomas K. Lew en Usa Today no es un caso aislado, sino un ejemplo de cómo el calentamiento global está afectando la salud humana de manera significativa y letal.
El fenómeno del calentamiento global se hace cada vez más evidente. La Tierra ha alcanzado nuevamente el hito de “día más caluroso registrado”, y esto no es simplemente un récord meteorológico, sino una señal de la crisis climática que enfrentamos. Con las elecciones de noviembre en el horizonte, es crucial mantener la crisis climática en el primer plano de nuestras prioridades.
Estamos en un camino hacia más de un año de temperaturas mensuales récord, y el Servicio Meteorológico Nacional ha advertido sobre el “riesgo de calor importante a extremo a nivel local” en todo el país.
Este incremento en las temperaturas tiene efectos directos y peligrosos sobre la salud humana. El golpe de calor extremo que sufrió el paciente mencionado es una muestra de cómo el cuerpo humano solo puede soportar el calor sofocante por un tiempo limitado antes de que los músculos se dañen y los órganos vitales comiencen a fallar.
Cada vez más estadounidenses están sufriendo enfermedades relacionadas con el calor. El año pasado, se registraron al menos 2,300 muertes debido al calor excesivo, más que en cualquier otro año registrado. Aunque las cifras de este año aún no se han publicado a nivel nacional, muchas comunidades ya están contabilizando las víctimas.
Además del costo humano directo, un estudio estima que el calor extremo es responsable de más de 235,000 visitas a salas de emergencia y de mil millones de dólares en costos de atención médica cada verano.
El cambio climático no solo se manifiesta en altas temperaturas, sino también en eventos climáticos extremos. Más incendios forestales están devastando el país, y uno de ellos actualmente está consumiendo 5,000 acres por hora en California.
Estos incendios no solo destruyen tierras, sino que también empeoran la calidad del aire, causando brotes más peligrosos de asma, bronquitis y enfisema. En los hospitales, las salas están llenas de pacientes asmáticos que luchan por respirar después de haber estado expuestos al humo de los incendios forestales.
En la otra costa del país, el cambio climático también está provocando fenómenos meteorológicos más intensos, como los huracanes. Las temperaturas oceánicas más cálidas favorecen el desarrollo de huracanes más fuertes, que devastan e inundan las zonas costeras del Atlántico.
Las personas desplazadas y vulnerables tienen más probabilidades de sufrir infecciones transmitidas por aguas contaminadas y moho, y el costo psicológico de estos desastres es incalculable.
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