Los seguidores de Trump abarrotan el recinto donde intentaron asesinarlo hace unos meses
Con horas de anticipación, los seguidores de Donald Trump abarrotaron el recinto ferial de Butler, Pensivania, donde intentaron asesinarlo hace unos meses
Crédito: Julia Demaree Nikhinson | AP
El regreso de Donald Trump a Butler, Pensilvania, se dio en plan grande ante la nutrida presencia de ciudadanos que ya sea, por solidaridad o morbo, abarrotaron el recinto ferial donde casi tres meses un estudiante intentó quitarle la vida mediante al menos ocho disparos.
Sin embargo, su puntería falló y tan sólo le perforó parte de su oreja derecha, pero en el lugar donde el republicano se reunió con sus simpatizantes otra persona también fue herida y una más perdió la vida de manera instantánea al ser impactada por otro proyectil.
A casi tres meses de distancia, el expresidente de 78 años decidió enfrentar al fantasma producido por el pavor de ver cómo la muerte le sopló el rostro a tan sólo unos centímetros de distancia.
Antes de la presentación del neoyorquino, el recinto ferial con sede en Butler, Pensilvania, lucía repleto de civiles y de agentes de Servicio Secreto, así como de personal de distintas corporaciones policiacas, cuya misión consistió en que esta vez nada pusiera en riesgo la integridad del hombre que aspira volver a la Casa Blanca mediante el respaldo en las urnas.
Desde horas de la presentación de Trump, sus partidarios se congregaron para darle la bienvenida ataviados con toda la parafernalia que caracteriza a los conservadores.
El objetivo en común era elogiar su valor de volver a presentarse para cumplir con el objetivo de hacerles llegar el mensaje inconcluso según lo prometió después de haber salido escoltado con sangre escurriendo por su cuello y rostro, pero con el puño en alto en señal de coraje.
De hecho, a través de un comunicado, su equipo de campaña anticipó que su retorno a Butler significaba un “tributo al espíritu estadounidense”.
“En Estados Unidos, no permitimos que monstruos como ese malvado asesino tengan la última palabra. Cada vez que nuestra nación sufre un ataque o una adversidad, nos unimos, perseveramos y prevalecemos.
Con la ayuda de la increíble gente de Pensilvania y de los ciudadanos de todo nuestro territorio, haremos que Estados Unidos sea un país más seguro, más fuerte, más libre y más grande que nunca“, indica parte de la misiva.
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