Trump sirve papas fritas en un McDonald’s y afirma que Harris jamás trabajó en uno

El candidato republicano a la Casa Blanca, el expresidente Donald Trump, hizo este domingo campaña en un local de McDonald’s en el estado clave de Pennsylvania donde acusó a su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, de mentir sobre su historial laboral.

La visita, a poco más de dos semanas del día de las elecciones, fue diseñada para burlarse de Harris, quien ha hablado sobre haber trabajado en uno de los restaurantes de la cadena de comida rápida cuando era más joven, pese a ello, Trump acusó a Harris de mentir sobre la experiencia como una forma de mejorar su credibilidad como miembro de la clase trabajadora.

Durante su experiencia, Trump cambió su chaqueta de traje por un delantal y recibió una breve instrucción de un cocinero. Luego, se encargó de la freidora, echó dos tandas de papas en aceite caliente y esperó a que se cocinaran. Siguió en gran medida las instrucciones, aunque se olvidó de escurrir por completo el aceite de una tanda y pareció ser más generoso con la sal.

Trump luego dirigió su atención a la ventanilla del drive-thru, llenando varios pedidos y charlando con los clientes que pasaban en sus autos.

“Esta no es una situación normal, ¿verdad?”, comentó, antes de asegurar a los clientes que no tendrían que pagar por su comida y alardear de que él mismo había preparado sus patatas fritas.

“No habrá ningún cargo”, dijo. “Trump lo está pagando… Todo esto es culpa de Trump, ¿puedo hacerlo?”

“Amo McDonalds. Amo los empleos. Y creo que es inapropiado cuando alguien dice por todas partes que trabajó en un McDonalds (…) pero nunca trabajó en un McDonald’s”, afirmó el republicano sobre su rival demócrata.

Según la campaña de Harris, la vicepresidenta trabajó durante el verano de 1983 en un McDonald’s de la ciudad de Alameda (California), atendiendo en la caja registradora y cocinando patatas fritas, para pagarse los estudios en la Universidad de Howard, en Washington.

Harris, que no ha ofrecido más detalles al respecto, suele explicar esa historia para mostrar cercanía con las clases trabajadoras y distanciarse de Trump, un magnate inmobiliario que heredó el imperio de su padre.

El portavoz de Harris, Ian Sams, respondió y afirmó que, “Cuando Trump se siente desesperado, lo único que sabe hacer es mentir… no puede entender lo que es tener un trabajo de verano porque le dieron millones en bandeja de plata y luego los desperdició”.

Cabe destacar que Harris no menciona en sus memorias su experiencia en McDonald’s y aparentemente la primera vez que habló de ello en público fue en su primera campaña presidencial de 2019, cuando se unió a los trabajadores en huelga de esa empresa en Las Vegas.

Esta no es la primera vez que Trump muestra su predilección por la comida rápida, ante, durante el cierre gubernamental en 2019, sirvió pizzas de McDonald’s, Burger King, Wendy’s y Domino’s en bandejas de plata para dar la bienvenida y celebrar a los campeones nacionales de futbol universitario Clemson Tigers durante su visita a la Casa Blanca.

Cabe destacar que en esta ocasión, la franquicia estuvo cerrada durante la visita del domingo y no quedó claro de inmediato cómo se seleccionaron los clientes del drive-thru atendidos por Trump.

En un comunicado, el propietario y operador del local, Derek Giacomantonio, dijo que decidió participar en el evento de la campaña de Trump porque “es un valor fundamental de mi organización que abramos con orgullo nuestras puertas a todos los que visitan la comunidad de Feasterville”.

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