Investigación sobre Marte da nuevos indicios sobre la presencia de un océano
Recientes investigaciones llevadas a cabo por NASA han originado mayores especulaciones respecto a la presencia de agua en Marte.
La exploración de Marte, mediante diversos dispositivos o instrumentos como el Reconnaissance Orbiter, de la National Aeronautics and Space Administration (NASA) y el Mars Express de la Agencia Espacial Europea, ha brindado nuevas pistas sobre la posible presencia de agua en el “planeta rojo”.
De acuerdo con una reciente investigación, dirigida por el científico Joe McNeil, del Museo de Historia Natural de Londres, se han descubierto nuevas pruebas, en forma de más de 15 mil montículos y colinas esparcidas por tierras bajas, que mostrarían la presencia de un vasto océano hace muchos años.
Según lo revelado en el estudio, a partir de las imágenes de alta resolución y datos espectrales de los instrumentos de la NASA y del Mars, los investigadores analizaron este tipo de formaciones, parecidos a cerros y mesetas, en comparación con las características geológicas de objetos terrestres que han sufrido una erosión prolongada y que muestran capas de roca diferenciadas.
¿Hubo agua en Marte?
De acuerdo con las fotografías obtenidas, el equipo también logró identificar una serie de depósitos de minerales arcillosos. Este tipo de material se forma cuando el agua interactúa con rocas durante largos periodos de tiempo.
Lo anterior mostraría que existió un entorno húmedo y potencialmente habitable hace millones de años.
Esto demuestra que debe haber habido mucha agua presente en la superficie durante mucho tiempo. Es posible que provenga de un antiguo océano del norte de Marte, pero esta idea aún genera controversia”
La orografía de Marte, examinada desde hace años, también ha brindado diversas pistas respecto a la presencia de agua en el planeta. Y es que mientras en el hemisferio sur de Marte existe una amplia población de tierras altas, en el hemisferio norte se puede ver la presencia de tierras bajas erosionadas.
Lo anterior ha originado una serie de especulaciones respecto a la presencia de un océano en las llanuras del norte, con ríos y arroyos que alimentaron dicho cuerpo durante un período de entre 4,200 y 3,700 millones de años.
Los montículos preservan una historia casi completa del agua en esta región dentro de afloramientos rocosos contiguos y accesibles”
Dichos descubrimientos se llevaron a cabo sobre la zona de Chryse Planitia, una región moldeada por la erosión hídrica y eólica que también sirvió como lugar de aterrizaje de la misión Viking 1 de la NASA en 1976.
Esta zona también está vinculada con Oxia Planum, el sitio de aterrizaje para el rover Rosalind Franklin de la Agencia Espacial Europea en 2028.
Continúa leyendo:
NASA descubre nueva evidencia de la presencia de agua en Marte
Satélites de la NASA detectan la desaparición de una “isla fantasma”