Fallece Jim Irsay, dueño de los Indianapolis Colts y figura clave en la era dorada del equipo
Jim Irsay fue el dueño de los Colts desde la temporada en 1997 tras relevar a su padre y ganó un título en 2007
Los Colts lamentaron la muerte de Jim Irsay. Crédito: Darron Cummings | AP
Jim Irsay, histórico propietario de los Indianapolis Colts, falleció este miércoles a los 65 años. La noticia fue confirmada por Pete Ward, su mano derecha y director de operaciones del equipo, a través de un comunicado oficial.
“La dedicación y pasión de Jim por los Colts de Indianápolis, además de su generosidad, compromiso con la comunidad y, lo más importante, su amor por su familia, fueron incomparables”, escribió Ward. “Nuestras más profundas condolencias van para sus hijas, Carlie Irsay-Gordon, Casey Foyt, Kalen Jackson, y toda su familia mientras compartimos su dolor”.
Irsay murió pacíficamente mientras dormía, según el comunicado.
El legado de Jim Irsay en la NFL
Jim Irsay tomó el control total de los Colts en 1997, sucediendo a su padre, Robert Irsay. Sin embargo, su relación con la franquicia comenzó mucho antes, cuando trabajaba como recogepelotas del equipo. A los 24 años, se convirtió en el gerente general más joven en la historia de la NFL.
Durante su mandato como propietario, Irsay transformó la franquicia. Junto al gerente general Bill Polian, el entrenador Tony Dungy y el mariscal de campo Peyton Manning, convirtió a los Colts en un contendiente perenne al título. Bajo su liderazgo, el equipo ganó el Super Bowl XLI en 2007, uno de los mayores logros en la historia de la franquicia.
Irsay también fue el artífice de la construcción del Lucas Oil Stadium, inaugurado en 2008, que se convirtió en uno de los recintos más modernos de la NFL.
Problemas de salud y retiro gradual
En los últimos años, Irsay luchó contra problemas de salud, incluyendo una enfermedad respiratoria, tras una caída en su casa en diciembre. En ese incidente, agentes de policía de Carmel, Indiana, lo encontraron inconsciente y con baja oxigenación, situación que alarmó a su entorno.
Además, Irsay había sido abierto sobre sus batallas contra el alcoholismo y la adicción a los analgésicos, lo que contribuyó a su creciente ausencia pública en momentos clave, como el pasado Draft de la NFL.
El verano pasado, en el campamento de entrenamiento del equipo, se presentó en un carrito de golf y habló brevemente sobre su rehabilitación tras dos cirugías, aunque su estado de salud seguía siendo motivo de preocupación.
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