Xiaomi YU7, el SUV eléctrico con 100,000 ventas previstas

Xiaomi ha logrado lo que muchos fabricantes tradicionales solo pueden soñar: capturar la atención del mercado automotriz global con una propuesta eléctrica ambiciosa y sin experiencia previa.

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El debut de su primer coche, el SU7, sorprendió a propios y extraños por su agresiva relación precio-prestaciones. Pero lo que sigue promete aún más.

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La firma tecnológica china, conocida por sus teléfonos y dispositivos inteligentes, vuelve a sacudir el tablero con su segundo automóvil: el Xiaomi YU7.

Este SUV, aún sin una unidad fabricada, ya tiene un destino trazado por sus creadores: dominar la segunda mitad de 2025 con 100.000 unidades entregadas entre julio y diciembre.

Una proyección audaz que desafía cualquier expectativa del sector, especialmente viniendo de una empresa con menos de dos años de experiencia en el mercado automotor.

Al contrario de lo que se podría pensar, Xiaomi no se deja intimidar por su corta trayectoria. Más bien, ha aprovechado su experiencia en el desarrollo de productos de alta demanda para aplicar su fórmula a la industria automotriz. Y todo indica que funciona.

El SU7, su primera apuesta, fue un verdadero fenómeno en China. Su lanzamiento, en enero de 2024, generó un torrente de pedidos casi instantáneo. Xiaomi planeaba vender 60.000 unidades en su primer año, pero en apenas minutos ya había recibido más de 50.000 pedidos.

Un tsunami de demanda que obligó a la compañía a acelerar la producción. Al finalizar ese año, Xiaomi logró entregar más de 130.000 SU7. Más del doble de su previsión inicial.

Inspirados por ese éxito, los ejecutivos de la marca quieren ir por más. El YU7 no es solo su primer SUV eléctrico, sino también su arma para competir directamente contra el que ha sido, durante más de cinco años, el referente global en su categoría: el Tesla Model Y.

Según las estimaciones oficiales, Xiaomi espera vender 100.000 unidades del YU7 durante los primeros seis meses desde su lanzamiento.

Eso significaría que, en promedio, la compañía debería entregar más de 16.000 vehículos al mes, una hazaña logística considerable teniendo en cuenta que la producción arrancará en julio.

El propio Lei Jun, CEO de Xiaomi, ha sido claro sobre sus ambiciones. Durante la presentación oficial del vehículo, en la que también se desvelaron sus especificaciones técnicas, se mostró confiado en el rendimiento comercial del modelo.

La compañía planea cerrar el año con una cifra global de 380.000 vehículos eléctricos entregados, incluyendo las unidades del SU7 y del YU7. De lograrse, Xiaomi pasaría a ocupar un lugar relevante dentro del competitivo mercado chino de autos eléctricos, dominado hasta ahora por BYD, NIO y Tesla.

“Hasta ahora, los vehículos han sido diseñados principalmente con usos limitados y estructuras basadas en sus perfiles. Carros orientados hacia la familia usualmente carecen de diversión en la conducción, mientras que aquellos que son divertidos de manejar no suelen ser aptos para familias”, declaró Jun, reflejando el pensamiento detrás del diseño del YU7. Este SUV pretende ser tanto práctico como emocional, una máquina para la familia pero también para disfrutar de la conducción.

YU7 vs. Model Y: una batalla frontal

Xiaomi ha hecho los deberes. Si hay un rival claro en el horizonte, ese es el Tesla Model Y. El nuevo SUV chino ha sido diseñado con ese competidor en mente, y según los datos preliminares, está preparado para competirle de tú a tú, al menos sobre el papel.

En dimensiones, el YU7 supera al Model Y por unos 20 centímetros, lo que se traduce en mayor espacio interior y más presencia visual. Sin embargo, donde realmente impresiona es en su autonomía.

La versión de mayor alcance del YU7 promete hasta 835 kilómetros por carga, una cifra que supera ampliamente los registros del Model Y en cualquiera de sus variantes. Claro está, estas cifras están sujetas al ciclo de homologación chino, que suele ser más optimista que los estándares europeos o estadounidenses. Aun así, marcan un punto de partida ambicioso.

En cuanto a diseño, el YU7 mantiene el lenguaje visual moderno e incluso minimalista que Xiaomi estrenó con el SU7. Líneas fluidas, una parrilla cerrada, luces LED finas y un interior dominado por pantallas digitales son parte del ADN visual del modelo.

A eso se suma un habitáculo que combina materiales sostenibles con alta tecnología, todo enmarcado en un enfoque premium que, según Xiaomi, no elevará en exceso el precio.

Un SUV asequible con ambición global

Aunque Xiaomi no ha confirmado aún el precio exacto del YU7, todo indica que será más económico que el Tesla Model Y. Según diversas fuentes, el precio de partida rondará los 240.000 yuanes, que equivalen a aproximadamente $33,000 dólares. Esto posicionaría al YU7 justo por encima del SU7, que parte desde los $30,000 dólares. En contraste, el Model Y arranca en los 263.900 yuanes, o cerca de $36,500 dólares.

Esa diferencia de más de $3,000 dólares podría ser clave para captar a un público más amplio. Xiaomi sabe cómo jugar con los márgenes y la escala de producción, y planea aplicar esa misma filosofía al sector automotor. Esto también le permite ofrecer un producto tecnológicamente muy avanzado a un precio competitivo.

¿Y fuera de China qué podría pasar?

Por el momento, el Xiaomi YU7 está destinado exclusivamente al mercado chino, aunque los planes de expansión internacional no se descartan.

Si la demanda lo respalda, es probable que la compañía considere su llegada a mercados como el europeo, donde el SU7 ya ha despertado cierto interés mediático, o incluso a Latinoamérica, donde el factor precio puede jugar un rol crucial.

Sin embargo, antes de pensar en conquistar otros continentes, Xiaomi debe asegurar la producción y distribución eficiente del YU7 en su mercado local.

La capacidad de su fábrica en Beijing, que ya ha sido puesta a prueba con el SU7, será una pieza clave en esta nueva etapa. De momento, las cifras previstas —100.000 unidades en seis meses— son más que ambiciosas.

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