Israel amenaza al máximo líder de Irán después de que misiles dañan hospital e hirieron a más de 200 personas
El ataque impactó el Hospital Soroka, en el sur de Israel, lo que las autoridades describieron como un ataque deliberado contra la infraestructura del país
El ministro de Defensa, Israel Katz, afirmó que el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, "ya no puede seguir existiendo". Crédito: Leo Correa | AP
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, advirtió que “ya no se puede permitir que el líder supremo de Irán exista” después de que un hospital fuera alcanzado por un ataque con misiles iraníes el jueves, lo que aumentó las tensiones en la guerra que ya dura una semana.
Según agencias internacionales, misiles iraníes impactaron en un importante hospital del sur de Israel y alcanzaran edificios residenciales cerca de Tel Aviv, hiriendo al menos a 240 personas. Mientras los rescatistas sacaban a los pacientes del hospital en llamas, aviones de guerra israelíes lanzaron su último ataque contra el programa nuclear del país.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo que Irán “pagará un alto precio” por el ataque al hospital, mientras que el ministro de Defensa, Israel Katz, emitió una dura advertencia, ” Khamenei declara abiertamente que quiere destruir a Israel; él mismo da la orden de disparar contra los hospitales”.
Israel Katz culpó al líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, por el ataque del jueves y dijo que el ejército “ha recibido instrucciones y sabe que para lograr todos sus objetivos, este hombre no debe seguir existiendo”.
Aunque no estaba claro si el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenaría a las fuerzas estadounidenses unirse a la amplia campaña de Israel contra el programa militar y nuclear de Irán, el primer ministro, Benjamin Netanyahu, dijo que confiaba en que Trump “haría lo mejor para Estados Unidos”.
“Puedo decirles que ya están ayudando mucho”, dijo Netanyahu desde los escombros y los vidrios rotos alrededor del Centro Médico Soroka en la ciudad de Beersheba, al sur de Israel.
Así, mientras el presidente Donald Trump analiza la posibilidad de una intervención estadounidense, el Hospital Soroka, en la ciudad sureña de Beersheba, quedó en llamas tras un bombardeo que, según Irán, tenía como objetivo una base militar y de inteligencia.
Sin embargo, Rusia, aliado de Irán, dijo a Estados Unidos que unirse al conflicto sería un “paso extremadamente peligroso”.
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