Dreamers regresan a EEUU legalmente gracias a un programa educativo de intercambio
Jóvenes DACA reciben un gran oportunidad

Una reunion con participantes nuevos y antiguos del programa de intercambio. Crédito: Fotos: Isaac Ceja | Impremedia
Ana Cristina Zamora regresó a México por primera vez desde que tenía cinco años y tuvo la oportunidad de ver a su abuela en Sinaloa después de décadas separadas.
“Definitivamente no lloré por mucho tiempo porque siento que todavía lo estaba procesando”, dijo Zamora que es originaria de Tijuana y creció en Boyle Heights. “Pero me conmovió mucho, se me llenaron los ojos de lágrimas y me sorprendió lo mucho que podía recordar de mis veranos allí”.
Zamora fue junto con su hermana menor y las dos pudieron aprender y disfrutar de la cultura e historia del país gracias a un programa en la Universidad de Colima.
Por tercer año consecutivo, una asociación entre La Red de Liderazgo del Sureste y la Universidad de Colima ofrece a las personas amparadas bajo la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) un programa de intercambio académico.
“Al regreso lo más importante es la posibilidad de continuar o de resolver un trámite migratorio que para ellos en todos los casos es un tema muy importante”, dijo el rector de la Universidad de Colima Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño. “Entonces poderles ayudar como universidad, como institución de educación superior para nosotros ha sido muy satisfactorio”.
Este año tendrán alrededor de 23 participantes y será compuesto en su mayoría de beneficiarios de DACA, que hayan obtenido una autorización previa de viaje de parte de el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos a través del programa denominado como “Advance Parole”(la libertad condicional anticipada) con fines educativos.
“El beneficio de este programa para los participantes no solo es académico, sino que permite a los estudiantes reconectarse con sus raíces, su familia, sus amistades y lo más importante les permite tener una entrada al país autorizada”, dijo Sergio Infanzon, co-fundador de La Red de Liderazgo del Sureste.
El programa consiste en sesiones intensas por 10 días cubriendo temas relacionados con la estructura de las instituciones del gobierno mexicano, su organización, el sistema electoral, el diseño estructural de la administración y sus políticas públicas más importantes.

En el proceso serán recibidos en el congreso del estado, y las alcaldías correspondientes de la región. La segunda parte del programa consistirá en sesiones de estudio de la política ambiental, y educativa del país. Asimismo, se cerrará el programa con sesiones de estudio de la literatura, cine, fotografía, lenguaje, periodismo y prácticas televisivas de México y la región.
Los estudiantes de la facultad de turismo serán sus anfitriones y otros grupos de estudiantes participarán de talleres y sesiones de discusión con los Dreamers.
Este año una de las participantes será Lucia Paola Aguilar, quien cuando escuchó del programa en su iglesia estaba asombrada.
“Pensé que era algo increíble, porque tengo tantos años aquí y nunca había sabido de un programa así”, dijo la joven que nació en la ciudad de México y llegó a EEUU a los 14 años.
Ahora con 30 años en EEUU, la mexicana tuvo dificultades después de terminar la preparatoria debido a que no podía ingresar a la universidad.
Pero eventualmente tomó cursos técnicos y al volver a la escuela trabajó como enfermera registrada hasta convertirse en administradora.
Actualmente, Aguilar se siente emocionada de la oportunidad, pero a la vez teme las posibilidades debido a las redadas que se han visto bajo la presidencia de Trump.
“Aunque te lo cuenten y que te digan que lo han visto, siempre pues quedan ciertas dudas, más la incertidumbre por todo lo que está pasando, lo que pasa en las noticias”, dijo Aguilar.
Según Infanzon, llegaron a tener 45 personas registradas, pero el temor por situación migratoria bajo al Administración se ha reducido a 23.
Durante una reunión con participantes pasados y nuevos, un participante nuevo preguntó acerca de las dudas que tenía de regresar y el rector trató de aliviar su incertidumbre.
“Somos una universidad muy seria, muy formal y si nosotros viéramos desde allá que hay algún riesgo, evidentemente lo vamos a decir”, dijo el rector Zermeño. “Entonces, tengan la seguridad de que tienen ojos en todos lados”.
Infanzon agregó que al terminar el intercambio académico todos los estudiantes viajarán juntos para el regreso a Tijuana y a pesar de que siempre vaya a ver un riesgo, él tratará de minimizar ese riesgo lo más posible.