Siguen las redadas de ICE en Los Ángeles
Arrestan a cuatro trabajadores de un lavado de automóviles en Montebello; temen que la situación empeore para los inmigrantes

Agentes de ICE detienen a dos hombres en un carwash de Montebello. Crédito: AP
Las redadas de inmigración no dan tregua ni un respiro básicamente a trabajadores de compañías de lavado de autos y jornaleros que solicitan trabajo afuera de las tiendas Home Depot, las cuales se han convertido en el epicentro de la violación de derechos humanos y civiles más nefasta de la administración del presidente Donald Trump.
“Hay dos razones por las que se han incrementado las redadas”, dijo Melvin Valiente, pastor de la Primera Iglesia Bautista de Maywood. “Primero, es obvio que se trata de una especie de castigo del gobierno federal a California, porque siempre ha levantado la voz en favor de los inmigrantes y no está de acuerdo con las políticas de ellos”.
En segundo lugar, recordó que Trump y sus aliados han dicho que atacarían a los estados y ciudades que son santuario y “fuertemente demócratas”.
“Pero no solamente están atacando el en área de inmigración, sino reteniendo fondos federales que el estado y suspendiendo programas como el Medicaid, que California utiliza para un gran porcentaje de gente que no tienen documentos para ir a hospitales o comprar medicinas.
Un día después de una redada migratoria en Garfield Car Wash de la ciudad e Montebello, José Rosete lamentaba que su hermano Jorge haya sido uno de los cuatro “carwasheros” arrestados por agentes encapuchados de ICE, el viernes a las 11:40 de la mañana. Dos de México y dos de Guatemala.

“Yo solamente trabajo los fines de semana. No estaba aquí”, dijo. “Me contaron que mi hermano se puso nervioso y quiso correr cuando venían hacia él y lo detuvieron. Él está bien. Llamó a mi mama para avisarle y ya fui a visitarlo. Le llevé un suéter y un medicamento que necesita para la diabetes”.
Jorge Rosete, uno de nueve hermanos originarios de Morelos, México, se encuentra recluido en el Centro Metropolitano de Detención, ubicado en la avenida Alameda.
En ese mismo lugar está detenido Eduardo Mazariegos, cuyo hermano, Frankie Mazariegos limpiaba carros

“Nosotros somos gente honrada. No somos ladrones. No somos criminales”, dijo Frankie, quien informó que su hermano emigró a Estados Unidos hace nueve años. Los otros dos arrestados fueron Narciso Modesto y Erick “N”.
“Destrozar familias es horrible”
Denis Oratowski, propietario de Sonora Bakery, un negocio ubicado por la misma calle Garfield donde ocurrió la redada señaló que la inmigración en Estados Unidos “es un mal necesario”.
“Desgraciadamente hay mucha mala gente que está por aquí y está haciendo mucho desastre en los negocios, pero también hay mucha gente que no tiene nada que ver con eso. Es gente que ha trabajado acá hace muchos años, gente de familia, gente de respeto y lamentablemente eso nos está afectando a todos”.

Oratowski añadió que la gran mayoría de inmigrantes ha estado trabajando por muchos años en Estados Unidos y haciendo su vida sin molestar a nadie.
“Son familias que tienen gente con y sin papeles las que han sido dramáticamente afectadas con todo este problema [de las redadas]”.
¿Cree usted que se están aplicando correctamente las leyes de inmigración bajo esta administración de Donald Trump?
“Las leyes son las leyes. Hay que respetarlas, pero si es la mejor manera de hacerlo es otra cosa. ¿Están haciendo las cosas bien? ¿No están haciendo las cosas mal? Depende un poco de qué parte de la moneda que la estás mirando, pero destrozar familias es absolutamente horrible…dividir familias con papeles o sin papeles son políticas que están causando muchos problemas”.

Y, frente a la tienda de Home Depot, en la ciudad de Monterey Park, el salvadoreño Omar Erazo y su amigo mexicano, Isaías Fermín, ambos trabajadores de la construcción, coincidieron que, en las redadas no hay un protocolo para realizar las detenciones conforme a la ley.
“Todo es político y sin humanidad”, dijo Omar.
“La situación de los inmigrantes debe abordarse de manera más humana y menos política”, añadió Isaías Fermín, oriundo del Estado de México.
Identifican a inmigrante atropellado
El pastor Valiente recordó a Roberto Carlos Montoya, identificado ayer como el inmigrante originario de Jutiapa, Guatemala, quien se convirtió en la más reciente víctima fatal de la persecución de ICE.
El jueves Roberto Carlos, de 52 años, huía de una redada en el Home Depot de la ciudad de Arcadia, corrió hacia la autopista 210 y fue atropellado brutalmente.

“Es otra muestra de la destrucción familiar, a causa de la persecución federal, dijo el pastor. “La gente más vulnerable es la que sufre las consecuencias de un sistema sin compasión”.
En julio, la presencia de hombres enmascarados y armados con ametralladoras provocó que Jaime Alanís García fuera presa del pánico, durante una redada en Camarillo. El hombre cayó al vacío después de correr sobre un techo de cristal en la compañía procesadora de cannabis.
Y, el 11 de junio, Jesús González, un inmigrante mexicano de 33 años, perdió el brazo izquierdo tras ser atropellado por un tren mientras huía de una redada de ICE en La Mirada, California. González regresaba a casa de su trabajo de soldadura.

Va creciendo la cifra de muertes
Además de Roberto Carlos y de Jaime Alanís García, se han registrado otros ocho fallecimientos de personas en custodia de ICE, tan solo en los primeros seis meses del gobierno de Trump. Esa cifra ya supera el número de muertes reportadas en el primer semestre de cada año desde 2018. Solamente en 2020 se reportaron 18 muertes.
“A ellos no les importa nada. Solo quieren cumplir la meta que les ha impuesto Kristi Noem [secretaria del Departamento de Seguridad Nacional o DHS]”, declaró Salvador Sanabria, director de la organización defensora de inmigrantes El Rescate. “Noem, el ideólogo de las deportaciones masivas, Stephen Miller y el zar de la frontera, Tom Homan, quienes aspiran a la detención y arresto de 3,000 inmigrantes por día.
“La meta que tiene Trump es de un millón de deportaciones para el 20 de enero de 2026”, dijo Sanabria. En esa fecha se cumple el primer año de su mandato. “El enfoque de ellos son los estados y las ciudades santuario y quieren darles una lección a los demócratas y creo que esto solo va a empeorar”.
Sanabria consideró que la comunidad inmigrante se encuentra en una carrera contra el tiempo, porque, además, la administración republicana tiene que cumplir la contratación de 10,000 agentes de inmigración, gracias al refuerzo presupuestario que obtuvieron en la “gran y bella ley” promulgada por Trump.
Actualmente, el presupuesto anual de ICE para detención de inmigrantes es de $3,400 millones.
Sin embargo, la agencia gubernamental recibiría $45,000 millones para gastar en detenciones, arrestos y deportaciones hasta septiembre de 2029.
El activista expresó que la culpabilidad y responsabilidad de las muertes y lesiones de los inmigrantes recae exclusivamente en el gobierno, por la aplicación del perfil racial de las autoridades migratorias en la actualidad.
“No han respetado el debido proceso donde han realizado capturas”, dijo. “Salen a la calle con una red a cazar latinos. Tú no oyes que hayan cazado a ucranianos, rusos, armenios o europeos; el 90% de los capturados son latinos y eso significa la actitud xenofóbica de parte de Estados Unidos”.
Y, a raíz de los abusos y el lujo de violencia con la que someten a las personas y las encarcelan, Sanabria comentó que, también, el liderazgo de la secta MAGA (Make America Great Again/Hacer Grande a Estados Unidos Otra Vez) busca lograr una “limpieza étnica”.
“Eso está claro”, subrayó.