Inmigrantes podrían enfrentar más barreras para aplazamiento en deportaciones
Los inmigrantes que enfrentan procesos de deportación o buscan protección de asilo podrían enfrentar más desafíos en tribunales tras decisión de BIA

Las cortes migratorias tienen varios ajustes. Credit: Yuki Iwamura | AP
La Junta de Apelaciones de Inmigración (BIA, por su siglas en inglés) determinó que los jueces migratorios no pueden aplazar una audiencia de deportación, si la defensa de un inmigrante expone un argumento “especulativo” de protección alterna.
“Por lo general, un juez de inmigración no debería aplazar una audiencia individual basándose en la afirmación especulativa del demandado de que podría ser elegible para una nueva forma de exención de la deportación que no se haya planteado previamente”, indica la decisión de la BIA del 28 de agosto.
La decisión establece que la defensa de un inmigrante no puede presentar argumentos adicionales sobre una protección de estancia en EE.UU. para su cliente, si tal argumento no fue establecido desde el inicio del proceso.
La apelación del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) fue presentada ante la BIA luego de que el 5 de junio, un juez aplazó la audiencia de un caso que data de 2017, cuando el demandando presentó una petición de asilo; en 2022 solicitó una prórroga, la cual fue concedida, programando una audiencia para el 2 de enero de 2025. Debido al proceso, el inmigrante no podía ser deportado.
Llegada la fecha del 2 de enero, la defensa presentó otra prórroga, concecida para el 5 de junio de este año. Ahí fue donde los problemas se complicaron y, bajo la nueva administración del presidente Donald Trump, las acciones del DHS sobre casos en tribunales fueron endurecidas.
“El 21 de mayo de 2025, el demandado presentó una segunda moción de aplazamiento de la audiencia individual, esta vez para recabar pruebas que respaldaran una solicitud de cancelación de la deportación bajo la regla especial para cónyuges maltratados”, indica el documento de la BIA.
El DHS consideró que ese argumento era “especulativo”, debido a que no había formado parte del caso desde un inicio. El juez migratorio concedió el aplazamiento de la audiencia, por ello las autoridades federales apelaron.
“En la audiencia, el abogado del demandado declaró que este había sido maltratado físicamente recientemente por su esposa y solicitó tiempo adicional para determinar los hechos, recabar pruebas y obtener la reparación adecuada”, según el reporte. “El abogado del demandado también explicó que estaba considerando presentar una moción de desistimiento debido a la falta de comunicación y cooperación previas por parte del demandado”.
Fue cuando el DHS se opuso a la moción de aplazamiento por falta de justificación, la cual fue concedida por la BIA, que ahora señala que los jueces no deben considerar argumentos “especulativos” para autorizar el aplazamiento de una audiencia.
“Este caso plantea cuestiones importantes sobre las prórrogas en el contexto de las audiencias individuales. Dado que estas cuestiones a menudo se vuelven irrelevantes antes de una apelación del caso y, por lo tanto, evaden la revisión, consideramos apropiado ejercer jurisdicción sobre esta apelación interlocutoria”, indica la opinión del juez Garry D. Malphrus, jefe de la BIA, nombrado por la actual fiscal general Pam Bondi.
Tal postura fue respaldada por los otros jueces: “Concluimos, tras una revisión de novo, que el juez de inmigración erró al determinar que el demandado demostró justificación suficiente para una prórroga”.
La decisión no cierra la puerta a las peticiones de aplazamiento, pero acota los argumentos presentados para ello.
“Si bien una prórroga para investigar y recopilar pruebas sobre la elegibilidad del demandado para obtener el amparo suele ser apropiada al inicio del proceso de deportación, un juez de inmigración generalmente no debería aplazar una audiencia individual basándose en la afirmación especulativa del demandado de que podría ser elegible para una nueva forma de amparo contra la deportación que no se había planteado previamente”, se advierte.
En este caso, el inmigrante buscaba una protección bajo violencia doméstica, en lugar de la petición de asilo presentada originalmente.
La Administración Trump está realizando varios cambios en cortes migratorias, como la integración de abogados militares como jueces, a pesar de la oposición de expertos en justicia migratoria, al considerar que se debe contratar a abogados con experiencia en inmigración y recibir la capacitación correspondiente para determinar casos de deportaciones o asilo, entre otros.
Las cortes migratorias mantienen un retraso de alrededor de cuatro millones de casos sin resolver.