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Denuncian ‘limpieza étnica’ de latinos ante la ONU

Maxine Waters, Dolores Huerta y abogados de derechos civiles llaman al pueblo a unirse a la campaña nacional www.change.org/JusticeForImmigrants

Dolores Huerta y Maxine Waters con los abogados  de derechos civiles.

Dolores Huerta y Maxine Waters con los abogados de derechos civiles. Crédito: Jorge Macías | Impremedia

La congresista demócrata de Los Ángeles, Maxine Waters, la activista Dolores Huerta y un grupo de abogados de derechos civiles comenzaron una campaña en línea www.change.org/JusticeForImmigrants para recolectar miles o millones de firmas en contra de la violación de los derechos humanos de las personas en Estados Unidos y la “limpieza étnica” que presuntamente lleva a cabo la administración del presidente Donald Trump, en contra de los latinos.

La meta inicial dijo el abogado Christian Contreras, es recabar 100,000 firmas que serían presentadas en una denuncia ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, “por las innumerables violaciones de los derechos civiles, humanos de inmigrantes y constitucionales de ciudadanos, quienes han sido arrestados y golpeados injustamente por agentes de ICE.

“Desafortunadamente, la administración Trump se ha embarcado en una agenda de limpieza étnica donde buscan a latinos”, afirmó el abogado Luis Carrillo. “Buscan rostros morenos en todo el país, ciudadanos e inmigrantes. Todos están siendo acorralados por este régimen”.

Carrillo dijo que, recientemente, la Corte Suprema de Estados Unidos “se puso del lado de esta presidencia proscrita”.

Una sociedad de segregación racial

“Ahora, necesitamos que las Naciones Unidas investiguen todos los abusos de derechos humanos que se cometen actualmente en este país. Donald Trump quiere convertir este país en una sociedad de apartheid, y ama a los afrikáners y a la gente de Noruega, pero odia a los mexicanos y a los latinos”.

El Apartheid en Sudáfrica se refiere a la segregación racial que acabó con el líder Nelson Mandela. Los afrikáners son un grupo étnico de piel pálida, principalmente de ascendencia holandesa, flamenca, alemana y hugonote francesa que habla afrikáans como su primera lengua.

Carrillo indicó que quieren una investigación independiente de relatores especiales de la ONU sobre derechos humanos en Estados Unidos.

La ONU está conmemorando su 80 aniversario de la fundación y, en vísperas de este aniversario, en Estados Unidos, “la gente es acorralada en las calles. No les importa si son ciudadanos o no. Solo buscan a la gente de piel oscura. Buscan a nuestra gente. Esto es un escándalo y tenemos que poner fin a estos abusos de derechos humanos en este país”, añadió el abogado.

Liderazgo despreciable

La congresista Maxine Waters, de 87 años, quien trabajó para la liberación de prisión de Nelson Mandela (11 de febrero de 1990) y ayudó a llevarlo a la presidencia de Sudáfrica, consideró que no tiene experiencia en hacer solicitudes ante la ONU. Como la campaña nacional en contra de la violación de los derechos humanos en Estados Unidos.

Sin embargo, enfatizó que, en primer término, la mayoría de los constituyentes de su distrito 43 son latinos y eso “es muy especial”.

“La población latina está creciendo, y estamos descubriendo que los jóvenes que se están educando están en todos los ámbitos de nuestra sociedad, prestando servicios. Trabajan, ganan dinero y contribuyen al crecimiento de la economía del país”.

Agregó que: “Lo que hace este presidente es odioso. Está decidido a dividir este país, convirtiendo a los latinos, en particular, en enemigos de todos, de los blancos, de los negros, de todos. Y este es el tipo de liderazgo más despreciable que la mayoría de los gobernantes han experimentado”.

Nunca lo imaginó

La activista Dolores Huerta, cofundadora del Sindicato de Trabajadores Agrícolas (UFW), junto al mítico César Chávez, consideró que nadie jamás pensó que sucedería en una democracia de los Estados Unidos de América.

“Se supone que debemos ser el faro en la colina para que todo el mundo vea que la representación puede funcionar y que las personas pueden elegir a sus propios líderes, y que podemos tener justicia para todos, Eso no está sucediendo para nuestras comunidades de color”, declaró la lideresa de 95 años.

Agregó que cuando la Corte Suprema “nos falla” y dice que “está bien que salgan y abusen, que se acerquen a las personas porque viven en barrios de bajos ingresos o hablan español. Esto no se aplica a las personas asiáticas. Se aplica también a algunas personas negras, como los haitianos. Esto es totalmente erróneo y antes quienes sufren abuso, pensamos: “¿Acaso esto está pasando en mi país?”. “¿De verdad está pasando aquí algo que ninguno de nosotros vería jamás?”.

Huerta recordó que le tocó vivir la Operación Espalda Mojada [del expresidente demócrata Dwight D. Eisenhower en 1954] “pero nunca vi un abuso como el que se ve hoy, cuando secuestran a la gente en la calle, se la llevan en coches sin distintivos, y quienes los secuestran van enmascarados para que nadie sepa quiénes son”.

“Esto tiene que parar. No podemos permitir que continúe. Ya han asesinado a gente. Queremos responder con la no violencia”, subrayó. “Si nuestra propia Corte Suprema no nos defiende, ¿adónde iremos ahora? El único lugar al que podemos acudir para presentar una petición es Naciones Unidas, que promulgaron los decretos que establecen que todas las naciones deben tratar a sus pueblos con dignidad y respeto”.

Una de las últimas veces vez que Dolores Huerta acudió a la ONU fue para denunciar las políticas genocidas de los gobiernos militares guatemaltecos, apoyados por el gobierno de Estados Unidos, mientras que Rigoberta Menchú, ganadora del Premio Nobel de la Paz en 1992, lideraba la lucha por los derechos humanos.

Vicente Menchú, el padre de Rigoberta, fue quemado vivo en 1980 durante un incendio en la Embajada de España en Guatemala, donde se había refugiado con un grupo de campesinos. Otros miembros de su familia, como su madre y un hermano, también fueron asesinados por el ejército guatemalteco.

Dolores Huerta dijo que nunca imaginó que desde su propio país debería acudir a las Naciones Unidas, “el país que fundó la idea de la democracia, para pedir ayuda y detener los abusos contra nuestra gente de color”.

“No podíamos permitir que nuestro país se convierta en una dictadura como la que tuvieron en Guatemala o la que tuvieron en la Alemania nazi”, expuso. “Todos tenemos que alzarnos, luchar por nuestro pueblo y decir: «¡Ya, basta! ¡Ya basta! ¡Ya basta!».

“Es repugnante”.

Tras señalar que Estados Unidos es una nación de inmigrantes y construida por inmigrantes, quienes “son la columna vertebral de este país”, el abogado Christian Contreras, peticionario principal de la intervención de los relatores especiales de la ONU, enfatizó que lo que se está viendo con las agresivas redadas de inmigración por parte de la administración Trump “es despreciable y repugnante”.

“Está librando una guerra contra su propia gente”, declaró Contreras. “Como por cómo se involucra [el país y los agentes federales de ICE] en estas medidas de aplicación de la ley inconstitucionales, viles e inhumanas”, declaró.

Manifestó que los fundadores de Estados Unidos no reconocerían lo que está sucediendo hoy, desde los “secuestros” de personas hasta la detención ilegal de inmigrantes y ciudadanos, o desde las tácticas contundentes de encadenar a mujeres embarazadas, el arresto de una familia con dos niños en el interior de un vehículo o el uso de agentes químicos para efectuar arrestos.

Uno de esos arrestos fue el de Cary López Alvarado, quien fue violentamente detenida y arrestada por cuatro agentes enmascarados de ICE.

Con nueve meses de embarazo, la joven madre fue agredida físicamente sin justificación el 8 de junio. Su bebé, Kailani, nació prematuramente cinco días después de su arresto.

Ella, todavía recuerda con horror su experiencia:

“Me maltrataron, me empujaron y me golpearon”, narró a La Opinión. “Cuatro agentes ignoraron mi embarazo. Me sentí humillada. Fui tratada como una criminal… Espero que mi caso sea conocido internacionalmente por las Naciones Unidas para sensibilizar sobre el trato inhumano hacia las personas embarazadas”.

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