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Alternativas a la terapia hormonal para la menopausia

Una dieta rica en vegetales y baja en grasas, además de la actividad física, es fundamental en esta etapa.

Alternativas a la terapia hormonal para la menopausia

Mujer asume con consciencia el paso de la menopausia. Crédito: Chay_Tee | Shutterstock

Recientes actualizaciones en el etiquetado de medicamentos de terapia hormonal pueden alentar a más mujeres a considerar esta opción. Sin embargo, aún existen mujeres que, debido a su historial de cáncer de mama, deben buscar alternativas no hormonales para el manejo de sus síntomas menopáusicos.

En este sentido, incrementar la actividad física es fundamental. Aunque no hay evidencia directa de que el ejercicio alivie los síntomas, puede ayudar a perder peso, lo que está relacionado con una disminución de los sofocos y la sudoración nocturna.

Por otra parte, adoptar una dieta rica en vegetales y soja, y baja en grasas, puede ser beneficioso. Además, evitar alimentos que puedan desencadenar sofocos, como la cafeína y el alcohol, es crucial para manejar los síntomas.

Medicamentos no hormonales

Medicamentos no hormonales, como antidepresivos, están mostrando eficacia para aliviar sofocos y problemas de ánimo. Fármacos recientes, como Veozah y Lynkuet, abordan directamente la regulación de la temperatura corporal y han recibido aprobación de la FDA.

También es importante considerar los posibles efectos secundarios de estos medicamentos. Por ejemplo, Veozah podría causar lesión hepática, mientras que Lynkuet puede provocar fatiga y dificultades para mantenerse despierto.

“No existe ningún medicamento que esté completamente libre de riesgos”, advierte a Associated Press (AP) la Dra. JoAnn Manson de la Facultad de Medicina de Harvard.

Estrategias adicionales

Entre los productos de venta libre, existen soluciones como lubricantes para tratar la sequedad vaginal, que pueden ser útiles para algunas mujeres.

Asimismo, la terapia cognitivo-conductual y la hipnosis clínica han mostrado evidencia moderada de efectividad en la reducción de la severidad de los sofocos, presentando opciones adicionales para el alivio de estos síntomas.

Entretanto, también está la alternativa de plantas medicinales y suplementos naturales como:

  • Cimicífuga negra: reduce sofocos y sudores nocturnos.
  • Trébol rojo: contiene isoflavonas que imitan el estrógeno.
  • Maca: favorece la libido y el equilibrio hormonal.
  • Salvia y lúpulo: alivian los sudores y sofocos.
  • Valeriana, pasiflora, kava, ashwagandha: ayudan con ansiedad e insomnio.

Manejo sincero de la menopausia

Por último, los expertos sugieren que es vital que las mujeres hablen abiertamente sobre sus opciones de tratamiento. Cambios significativos en el estilo de vida son fundamentales, existen soluciones disponibles y no es necesario simplemente soportar la menopausia.

Entre las recomendaciones de dieta y cambio de estilo de vida están las siguientes:

  • Consumir alimentos con fitoestrógenos: soya, semillas de lino, legumbres.
  • Incorporar ácidos grasos omega-3 para reducir inflamación y cuidar corazón.
  • Mantener rutina de sueño y actividad física regular.
  • Técnicas de relajación: respiración profunda, yoga, tai chi, meditación.

Hormonas y síntomas menopáusicos

Las hormonas juegan un papel significativo en el desarrollo de los síntomas menopáusicos en mujeres jóvenes, especialmente la disminución de los niveles de estrógeno y progesterona. Estos cambios hormonales provocan los síntomas típicos de la menopausia, como sofocos, sudoraciones nocturnas, sequedad vaginal, problemas para dormir, ansiedad, irritabilidad, cambios en el estado de ánimo, disminución del deseo sexual y alteraciones cognitivas como dificultad para concentrarse o confusión mental.

La progesterona está particularmente relacionada con la irritabilidad, ansiedad y sueño ligero, mientras que la baja producción de estrógeno afecta la salud vaginal, causando sequedad y molestias durante las relaciones sexuales, además de influir en los sofocos y la salud ósea.

Estos síntomas pueden presentarse incluso en mujeres jóvenes en casos de menopausia precoz y son resultado directo de la reducción en la producción ovárica de estas hormonas femeninas esenciales.

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