Jake Gyllenhaal busca con quien formar una familia
El actor ya quiere ser papá y está en busca de una pareja
Buenas noticias para las fans incondicionales de Jake Gyllenhaal: el actor siente que a sus 36 años por fin está listo dar un paso más en su camino hacia la madurez, por lo que ya ha empezado a buscar a la mujer perfecta con la que debutar en la paternidad.
“Quiero seguir madurando, para convertirme en un adulto, más de lo que ya lo soy. Y a poder ser me gustaría tener mi propia familia“, ha anunciado el intérprete en una entrevista a People.
Por el momento, y a la espera de encontrar con quién cumplir ese sueño, la estrella de cine vuelca su instinto paternal en sus dos sobrinas, Ramona (10) y Gloria (5), las hijas de su hermana, la también actriz Maggie Gyllenhaal.
“Mi hermana ha criado a dos niñas maravillosas, son unas chicas increíbles. Me divierte mucho poder mandarlas de vuelta a casa con un montón de caramelos porque es una especie de venganza, en plan: ‘¡Buena suerte, Maggie!’, por todas las veces que ella me hizo participar en un montón de espectáculos raros que montaba en las fiestas de nuestros padres”.
https://twitter.com/GyllenhaalicsFF/status/908559593378160641
A pesar de que siempre se ha caracterizado por ser una persona muy privada, los romances de Jake con celebridades de la talla de Kirsten Dunst y, especialmente, con la joven Taylor Swift le convirtieron muy a su pesar en el objetivo de los paparazzi.
De hecho, aunque han pasado ya diez años desde que concluyera su relación con la de Nashville, esa historia de amor sigue persiguiéndole debido a las canciones que la artista supuestamente compuso inspirándose en el tiempo que compartieron juntos -como “All Too Well”- y sobre la que recientemente incluso le pidieron su opinión a su hermana Maggie en el programa “Watch What Happens Live”, preguntándole si el verso “me dejé mi bufanda en casa de tu hermana / y aún la guardas en un cajón” se refería a ella, a lo que la intérprete contestó con una carcajada y dando evasivas.
En ese sentido, el actor ha sabido a aceptar que se trata de una consecuencia casi inevitable de su profesión a la que tampoco debe dar más importancia.
“He aprendido a reírme de verdad de todas esas cosas. Los demás siempre tendrán sus opiniones. Creo que he acabado por aceptarlo“, explica.