Grupo decidirá uso de terrenos tras cierre de plantas en Chicago
El nuevo grupo evaluará los terrenos que quedarán vacantes con el cierre de dos polémicas plantas generadoras de electricidad con carbón que contaminan barrios latinos en esa ciudad
Chicago – El alcalde Rahm Emanuel nombró hoy un grupo de trabajo para recoger opiniones y proponer el futuro uso de los terrenos que quedarán vacantes con el cierre de dos polémicas plantas generadoras de electricidad con carbón que contaminan barrios latinos de Chicago.
El Grupo de Trabajo para la Reutilización de Fisk y Crawford tendrá nueve miembros, entre ellos tres representantes de grupos ambientalistas, uno de la empresa Midwest Generation, propietaria de las plantas, y dos concejales latinos.
“El cierre de las plantas resuelve el problema inmediato, pero no es una solución a largo plazo”, dijo Emanuel en un comunicado.
“Tenemos que trabajar juntos para determinar el mejor uso de esos terrenos, que creará empleos y traerá oportunidades económicas a los barrios”, agregó.
El acuerdo para cerrar las dos plantas fue anunciado a fines de febrero, después de múltiples denuncias y demandas judiciales.
Se estableció que la planta Fisk, del barrio Pilsen, cerrará el 31 de diciembre de este año, y Crawford, del barrio mexicano La Villita, el 31 diciembre de 2014.
Al anunciar el acuerdo, la empresa Midwest Generation dijo que las condiciones del mercado de energía no permitían realizar las inversiones necesarias para modernizar las plantas y convertirlas a gas natural u otro combustible limpio en lugar de carbón.
Los grupos ambientalistas que combatieron la contaminación de las plantas durante años estarán representados en la comisión por Kimberley Wasserman Nieto, de la Organización de Justicia Ambiental de La Villita; Nelson Soza, de Pilsen Alliance y Jerry Mead Lucero de PERRO (Pilsen Environmental Rights and Reform Organization).
Los ambientalistas sostenían que las plantas anticuadas han contaminado y provocado enfermedades en dos barrios pujantes de Chicago durante más de 100 años.
La empresa había recibido un ultimátum del alcalde para ofrecer soluciones al problema o cerrar bajo las condiciones de una ordenanza sobre energía limpia que se iba a resucitar en el Concejo Municipal.
En esa ordenanza se obligaría a la empresa a convertir las plantas para usar gas natural u otro combustible limpio.
Los dos concejales escogidos son Daniel Solís (D-25), un veterano con 30 años de servicios comunitarios cuyo distrito cubre Pilsen y quien se había convertido en abanderado de la ordenanza sobre energía limpia, y Ricardo Muñoz (D-22), quien creció en el barrio mexicano que hoy representa.
Doug McFarlan representará a Midwest Generation, Bill McNeil a la empresa distribuidora de energía Commonwealth Edison, Tom Villanova al condado Cook y Kathy Dickhut a la municipalidad de Chicago.
Midwest enfrentaba demandas legales de residentes de las áreas afectadas, organizaciones comunitarias y ambientalistas, así como acciones gubernamentales, pero en el acuerdo se estableció el retiro de esas demandas.
Midwest se estableció en 1999 en Illinois después de adquirir las seis plantas de energía del estado que funcionan con carbón.
Además de las dos plantas de Chicago, tiene generadoras de electricidad en otras ciudades de Illinois como Waukegan, Joliet, Romeoville y Pekín.
El alcalde dijo que el Delta Institute, una organización sin fines de lucro con mucha experiencia en el reaprovechamiento de grandes superficies, trabajará con el grupo durante las audiencias públicas que se realizarán para recoger comentarios de la comunidad, y se encargará del informe final.
“Queremos encontrar formas para mejorar la vida de los habitantes de Pilsen y La Villita, y apoyar una economía regional que sea ambientalmente sostenible, rica en empleos e inclusiva de todos los residentes de Chicago”, dijo Jean Pogge del Delta Institute.
El apoyo financiero de la comisión provendrá de la Fundación Joyce y de Sierra Club, según el comunicado.