Es más que una ampliación
El proyecto de la autopista 710 debe tomar en cuenta el interés de la comunidad
El progreso exigido por el comercio debe tener un equilibrio con el impacto que causa este desarrollo dentro de la comunidad. En especial, cuando esta población ya ha visto perjudicada su salud bajo las condiciones actuales.
Este es el caso del proyecto para ampliar la autopista de Long Beach (710) como respuesta a la creciente necesidad de transportar más productos que entran al puerto de Long Beach, y de ahí se distribuyen al resto del país. Las autoridades estatales estiman que en la actualidad hay 14 millones de camiones anuales que recorren el tramo del puerto hasta el Este de Los Ángeles, anticipando que esta cifra puede llegar a los 43 millones en las próximas dos décadas.
El detalle del proyecto no esta definido, en este momento se manejan varias opciones en reuniones comunitarias y audiencias que están realizándose. Lo seguro es que significará un considerable aumento en las líneas de la autopista, especialmente con carriles para camiones.
El tráfico en esta carretera ya es uno de los más contaminantes de la nación. Dentro de las comunidades vecinas a esta autopista ya se registran altos niveles de males respiratorios y de asma infantil.
A ese efecto, Caltrans presentó recientemente un reporte de impacto ambiental en que describe que la ampliación de la autopista iba a “mejorar la calidad del aire y la salud pública”, además de numerosas ventajas para la comunidad vecina.
Este insólito optimismo no lo comparte nadie. Hay especialistas en salud que simplemente cuestionan como se puede aumentar la presencia de gases contaminantes y reducir el peligro a la salud. Mientras que las autoridades ambientales locales se quejan que Caltrans no ha entregado la documentación que respalde un análisis tan positivo.
Este es un proyecto de gran magnitud, cuya construcción significa la destrucción de al menos 200 casas y comercios. Ya en esa etapa habrá contaminación de aire y ruido.
Si bien esta es una construcción económicamente necesaria, esa misma prioridad también debe recibir la comunidad que se ve afectada por ella. Caltrans debe demostrar que esto es más que solo la expansión de una autopista, sino que también es el desarrollo local. Todavía está muy, pero muy lejos de demostrarlo.