El albergue gestionado por estudiantes en USC es un modelo para otros campus
Desde su apertura en el 2019, hasta 45 estudiantes llegaron a solicitar apoyo.
Serie: ‘Odiseas de estudiantes con vivienda insegura: obtener un título cuando no se tiene casa’
Quinto artículo de seis:
Hannah Mulroe creció en Chicago donde su padre dirige un albergue para la gente que carece de vivienda. Sabe de primera mano lo que tener acceso a un albergue puede significar para alguien sin un lugar permanente al que llamar hogar.
Ahora se encuentra en su último año en la Universidad del Sur de California (USC) estudiando Ingeniería industrial y de sistemas, y es además co-directora de Trojan Shelter, un programa para un número cada vez mayor en el campus de estudiantes carentes de vivienda.
Lo que hace único el Trojan Shelter es que es un programa completamente dirigido por estudiantes. Mulroe dice que empezó durante su primer año de universidad después de estudiar un curso llamado “Organizaciones sin ánimo de lucro e intereses públicos”.
El presidente y el fundador del Bruin Shelter, también conocido como “Students 4 Students” (Estudiantes para Estudiantes), hicieron una presentación de su misión a esa clase. En ese momento, dos compañeros de aula que llegarían a ser co-fundadores del Trojan Shelter preguntaron cómo podrían ellos ayudar a realizar esa misión.
El presidente y el fundador les aconsejó que empezaran su propio albergue.
Los compañeros de clase organizaron un equipo de ocho estudiantes para empezar, incluyendo a Mulroe. Pasaron juntos el año entero haciendo investigaciones, reclutando voluntarios y sentando las bases para empezar el programa.
Mulroe dice que su equipo se siente afortunado de que la iglesia St. Mary’s Episcopal Church en Koreatown ofreciera su espacio para alquilar el Trojan Shelter a un precio reducido cerca del campus de USC.
Todos los gastos se resuelven mediante donaciones y recaudaciones de fondos para el albergue. En el programa se proporciona una cama, tres comidas y un lugar para bañarse y estudiar para un máximo de seis residentes entre los 18 y los 26 años de edad por un año escolar entero garantizado.
“Pero, por otra parte, animamos a la gente a platicar con su trabajador social y encontrar otra vivienda antes”, dijo Mulroe. “También animamos a la gente a hacer lo que sea mejor para ellos”.
Mulroe agregó que debido a la pandemia, “hemos tenido que reducir nuestra capacidad a tres camas para permitir más distancia física. También ofrecemos un cuarto de aislamiento si uno de esos estudiantes tiene que hacer cuarentena”.
Cuando el Trojan Shelter abrió en noviembre de 2019, unos 45 estudiantes solicitaron albergue mediante Students 4 Students, conectado al Bruin Shelter. El equipo lleva una lista de espera continua, recomendando remisiones a otros programas para aquellos que no pueden aceptar debido a la falta de espacio.
Mulroe dice que varios estudiantes de otras universidades han contactado con Trojan Shelter para ver si pueden reproducir el programa. Los miembros del consejo están escribiendo una descripción que pueda servir como modelo.
“Yo diría que nuestro primer paso en definitiva fue reunir un fuerte equipo de estudiantes dispuestos a trabajar juntos en esto”, dijo Mulroe. “En nuestro caso, éramos ocho trabajando juntos, y dividimos las tareas para que pudiéramos hacernos cargo de este gran proyecto como equipo”.
También agregó que hay que reunir estudiantes voluntarios, asegurarse de que el espacio que se alquila cumple las normas del código de edificación, encontrar buenos recursos, y saber recaudar fondos.
Mulroe piensa volver a casa a Chicago después de graduarse y ayudar a estudiantes de universidades de allí a crear programas similares al Trojan Shelter. Tener estudiantes involucrados directamente, sin importar el tamaño de su contribución, le inspira a creer que su generación puede superar la crisis de la carencia de vivienda en el país.
Estos artículos se publicarán en La Opinión del 4 al 9 de enero. También los puedes leer en internet en Laopinion.com y en inglés en elnuevosol.net. (Traducción Patricia Ramos)
Gabriela Hernández
Gabriela Hernández y es estudiante de pregrado en la Universidad del Estado de California en Northridge. Su carrera es en periodismo televisivo con una especialización en periodismo en español. “Disfruto informar sobre noticias de entretenimiento y espero trabajar algún día en el campo del entretenimiento en español. En mi tiempo libre, disfruto pasar tiempo con la familia y conectarme con la naturaleza”.