Son niños estadounidenses las víctimas colaterales de la violencia con armas de fuego

En las últimas semanas el sur de California se ha visto plagado de un alza de criminalidad. Desde robos a mano armada hasta asesinatos a inocentes han causando preocupación de la comunidad y las autoridades.

Entre los más recientes tiroteos las autoridades de Anaheim reportaron que el miércoles por la noche una niña de 8 años fue rozada por una bala perdida que atravesó su hogar. El incidente se investiga como un ajuste de cuentas entre pandilleros.

Esto se da a tan solo una semana que en Boyle Heights un adolescente de 14 años, identificado como Jeremy Galvin, fuera abatido a tiros frente a un centro recreacional el 7 de diciembre.

Un día antes en Wilmington, Alexander Alvarado de 12 años murió cerca de su escuela el 6 de diciembre. Autoridades dijeron que unos sospechosos se acercaron a la camioneta de la persona con la que iba Alvarado y dispararon discriminadamente. En el incidente también resultó herida una niña de 9 años que jugaba en el patio de la escuela.

El 25 de noviembre en San Diego se tornó fatal cuando una bala perdida mató a Ángel Gaspar Gallegos, de 12 años, mientras jugaba en el patio trasero con sus primos y hermanos celebrando el Día de Acción de Gracias.

Y el 20 de noviembre en Pasadena Irán Moreno Balvaneda, de 13 años, falleció cuando una bala perdida cruzó la pared de su hogar mientras él jugaba videojuegos.

La organización anti armas de fuego Everytown for gun safety indica que en Estados Unidos todos los días más de 100 personas mueren a causa de la violencia con armas de fuego y cientos más resultan heridas.

Marco Vargas, estudiante universitario y miembro de Students Demand Action, una división de Everytown for gun safety, dijo que le duele mucho escuchar que estas tragedias ocurran y sobretodo cuando niños inocentes son involucrados.

Vargas dijo que con un aumento en las ventas de armas de fuego y de propietarios de armas por primera vez durante el último año y medio, se ha visto que el número de niños que viven en hogares con armas no protegidas aumentó a 5.4 millones de niños, frente a 4.6 millones hace seis años a nviel nacional, según la organización Everytown for gun safety.

“El almacenamiento seguro de armas de fuego es una solución que puede prevenir directamente incidentes como la muerte de niños por balas perdidas”, dijo Vargas quien creció en el sur centro de Los Ángeles.

Estrategias de soluciones

El joven activista añadió que para evitar un aumento en los tiroteos, es importante que las comunidades locales evalúen el tipo de violencia con armas de fuego que más les afecta, incluyendo los tiroteos policiales, los homicidios con armas de fuego en las ciudades, los suicidios con armas de fuego y la violencia doméstica en los hogares.

Aseveró que el trabajo puede comenzar localmente utilizando una variedad de estrategias de prevención de la violencia armada, diseñadas y aprobadas para reducir este tipo de violencia.

Indicó que con Students Demand Action, él se encarga de educar a estudiantes de bajos ingresos y sobrevivientes de la violencia armada a convertirse en catalizadores para la prevención de la violencia armada en su comunidad local.

“Nuestra crisis de violencia armada es una tragedia prevenible, pero durante demasiado tiempo, muchos de nuestros supuestos líderes solo han ofrecido pensamientos y oraciones”, dijo Vargas.

En Los Ángeles el jefe de la policía de Los Ángeles, Michel Moore, dijo que han creado estrategias para enfrentar al crimen violento, mediante el uso de policías en persona, investigadores, intervencionistas y trabajadores comunitarios que puedan identificar a las comunidades donde ocurren actos de violencia.

“Estamos trabajando con nuestros socios federales y socios encargados de hacer cumplir la ley para identificar a aquellos que están suministrando armas a estos vecindarios y para identificarlos y procesarlos con cargos federales y estatales en la mayor medida posible”, dijo Moore recientemente en una entrevista con los medios de comunicación.

Moore explicó que continuarán su compromiso de divulgación enfocándose en las comunidades más problemáticas para ayudar a reconstruirlas con oficiales en patrullas y a pie.

“No solo para disuadir la violencia, sino también para llegar a los miembros de nuestra comunidad y asegurarles que haremos todo lo posible para protegerlos”, dijo Moore. “Al mismo tiempo, estamos alertando al público de que estos delitos que están ocurriendo son reales”.

Adicionalmente el LAPD esta trabajando con los fiscales para enjuiciar a las personas que poseen armas o las usan, ya sea en un robo u otro tipo de asalto.