Por un futuro seguro y exitoso en Bright Star

Desde su fundación en 2003, la escuela Bright Star se ha enfocado en crear un ambiente donde se inspira a los estudiantes: esa misión se refleja en una tasa de graduación anual de 92%, un número superior en comparación a otras escuelas públicas en todo el estado de California que reportan una tasa del 86%.

Ana Martínez, la directora ejecutiva de Bright Star, explicó que el éxito de los estudiantes es posible debido al tamaño de sus escuelas, donde cada uno recibe más atención a comparación con la mayoría de las escuelas públicas con sus grandes salones.

“Estamos creando espacios en los que consistentemente no importa el puesto, podría ser maestro o no, todos los adultos en esa escuela creen en ti y todos los adultos en ese campus te presionan o se preocupan por ti hasta cierto punto”, explicó Martínez.

Actualmente, Bright Star cuenta con más de 3,600 estudiantes en 9 escuelas en los grados TK – 12 donde brinda apoyo holístico e inclusivo para lograr la excelencia académica y desarrollar sus talentos únicos para que encuentren alegría y satisfacción en la educación superior, la carrera y la vida.

El sistema educativo de estas escuelas es promover una escuela comunitaria y por esa razón decidieron tener 3 de cada tipo (primaria, secundaria, preparatoria) en 3 distintas áreas: West Adams/Baldwin Village, el sur de Koreatown y San Fernando.

El apoyo a los estudiantes de la organización de escuelas Bright Star es único y empieza desde el programa de kínder de transición hasta que se gradúen de cualquier institución de educación superior, lo cual significa que los estudiantes reciben casi 20 años de apoyo.

Bright Star tiene un enfoque clave en la educación superior y para la organización brindar acceso a todos los estudiantes es clave.

“El 100 % de nuestros graduados de la escuela secundaria son elegibles para la admisión a una escuela UC o Cal State”, dijo Angelina Calderón, vicepresidenta de Alcance y Compromiso.

Como la mayoría de los estudiantes en Bright Star son de primera generación, Bright Star reconoce que es difícil navegar el sistema educativo después de la preparatoria y por esa razón brindan hasta 6 años adicionales de apoyos para los estudiantes después de graduarse de la preparatoria.

Consejería, una prioridad
En las escuelas Bright Star, en promedio, tienen una proporción de estudiantes por consejero de 130 a 1, que es significativamente menor que en el estado de California, donde el promedio es de aproximadamente 572 a 1.

Recientemente, un exalumno de Stella High Charter Academy que es parte Bright Star, Elías Cruz, no tan solo se graduó de la preparatoria sino también recibió dos títulos asociados en artes en las ciencias sociales y del comportamiento y las artes liberales del colegio comunitario del suroeste de Los Ángeles.

Esto es posible gracias al programa de aprendizaje dual donde estudiantes pueden incluir clases o cursos de la universidad en su currículo para poder recibir créditos y terminar la universidad en menos tiempo.

Todos los estudiantes de la escuela son elegibles para el programa dual y además la escuela los apoya con el costo de materiales, la registración y cualquier otro obstáculo que tengan mientras tomen cursos de la universidad.

Otro programa ofrecido por Bright Star se llama Lecciones de experiencia de vida (LEL) que ha sido fundamental para la experiencia educativa en Bright Star Schools.

De acuerdo con Bright Star, llevan a los estudiantes por toda la ciudad, el estado y el país para que puedan ver las posibilidades para sus vidas.

Los estudiantes viajan a parques nacionales como Bryce Canyon y Zion National Park, recorren ciudades como San Francisco, Chicago, Nueva York y Washington, DC, además los estudiantes de secundaria de español AP (Advanced Placement) en Valor Academy High School incluso han viajado a España y Costa Rica.

Las escuelas Bright Star son gratis, públicas y abiertas para todos y atienden a los estudiantes en los grados TK-12 en sus escuelas chárter premiadas.

“No importa qué experiencias tuvo su hijo en otra escuela o si está en educación especial o si aprende varios idiomas, tráiganlos a todos”, dijo Martínez. “Los llevamos a un punto en el que tienen éxito y en el que son la versión más fuerte de sí mismos para estar preparados para afrontar la universidad y prosperar”.