Policía arresta al padre del sospechoso del tiroteo en escuela de Georgia
Según las autoridades, los cargos contra el padre se derivan en permitir conscientemente que su hijo posea un arma
Ya este año, los padres de un joven en Michigan, autor de un tiroteo, fueron condenados a prisión por delitos similares. Crédito: Mike Stewart | AP
El padre de Colt Gray, el joven de 14 años acusado de matar a cuatro personas en la escuela secundaria Apalachee en Winder, Georgia, fue arrestado y enfrenta cuatro cargos de homicidio involuntario, dos cargos de asesinato en segundo grado y ocho de crueldad.
De acuerdo al director de la Oficina de Investigaciones de Georgia (GBI), Chris Hosey, los cargos contra Colin Gray se derivan de “permitir deliberadamente que su hijo poseyera un arma”.
Además de los cargos de homicidio involuntario por cada fallecido, el padre del sospechoso está acusado de dos cargos de asesinato en segundo grado y ocho cargos de crueldad infantil, todos derivados de que “permitió deliberadamente que su hijo Colt tomara un arma”, dijo Hosey.
El joven, que utilizó un arma tipo fusil semiautomático AR-15, había sido investigado hace un año por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de Georgia por presuntamente haber amenazado con un tiroteo escolar a través de internet, y fue interrogado entonces junto a su padre.
En aquel interrogatorio, el joven negó ser responsable de las amenazas y su padre dijo que tenía armas en casa pero que estaban a resguardo del hijo.
Colt Gray, detenido ayer en el lugar de los hechos, afronta cuatro cargos de asesinato por los que será juzgado como un adulto, y se espera que mañana viernes se le lean formalmente los cargos ante un juez.
Cabe destacar que el caso de Colin Gray no es inédito, incluso, en abril de 2024 se vivió un hecho histórico, cuando James y Jennifer Crumbley, los padres de Ethan, el adolescente que mató a cuatro estudiantes en un tiroteo escolar en 2021 en Oxford, Michigan, fueron sentenciados a entre 10 y 15 años de prisión, respectivamente, semanas después de ser declarados culpables de homicidio involuntario.
De ese modo, Jennifer y James Crumbley se convirtieron este martes en los primeros padres del autor de un tiroteo escolar masivo en ser condenados como responsables indirectamente de un mortal tiroteo.
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