Aumenta seguridad por una amenaza
Ex empleado es arrestado por amenaza terrorista
El aeropuerto internacional de Los Ángeles (LAX) incrementó su seguridad ayer, luego de recibir una amenaza de bomba en una de sus terminales, en el aniversario de los ataques terroristas del 9/11.
El responsable, Naa Alpha Onuoha, de 29 años, era un ex empleado de seguridad del aeropuerto (TSA) que tras 7 años de trabajo el martes renunció.
Al hacerlo dejó un paquete sospechoso para un compañero de trabajo. El paquete incluía una carta en la que “hacía referencia al aniversario del 9/11 y se refería a los Estados Unidos con desdén”, dijo la vocera del Buró Federal de Investigaciones (FBI), Laura Eimiller. Pesuntamente Onuoha llamó a la policía del aeropuerto para decirles que evacúen las terminales 2, 3 y 6.
El individuo fue arrestado de inmediato.
Thom Mrozek, portavoz de la Oficina de la Fiscalía Federal en Los Ángeles, declaró por escrito que el hombre enfrenta hasta 15 años en prisión si se le encuentra culpable de dos cargos: uno por hacer falsas amenazas y el otro por interferir el comercio interestatal.
“A la luz de los recientes eventos, la policía del aeropuerto ha incrementado el número de oficiales dentro y alrededor del LAX y los aeropuertos de Ontario y Van Nuys”, dijo el jefe de la policía del aeropuerto de Los Ángeles (LAWA), Patrick Gannon.
“Visiblemente se podrá ver un gran número de oficiales a pie, en bicicleta, moto y patrullas”, aseguró y pidió a los viajantes que reporten cualquier actividad sospechosa a las autoridades.
Pero para algunos pasajeros, tal movimiento policiaco pasó totalmente desapercibido.
“Veo todo normal, no he tenido retrasos ni nada raro”, dijo Francisco Rivera, un pasajero de la aerolinea American Airlines, con destino a la ciudad de Dallas.
Martha Rodríguez, trabaja en el restaurante McDonalds de la terminal aérea, y dijo tampoco haberse percatado del incremento en la seguridad ayer. “Aquí siempre está muy vigilado, no es nada fuera de lo normal”, señaló.
El movimiento policial se extendió por la tarde hasta la ciudad aledaña al aeropuerto, de Inglewood, lugar de residencia de Onuoha, donde también se reportó un paquete sospechoso en la avenida Hindry.
“Un día después se ve como cualquier otro día, quizás Estados Unidos podría estar complacido que está seguro, que todo está bien. Cada día trae riesgos, cada día trae sus héroes y sabemos que estos héroes nunca serán olvidados”, dijo el alcalde Garcetti.
La detención del exagente de TSA también sirvió para recordar a los residentes que denuncien cualquier actividad sospechosa en sus vecindarios. “Somos un Los Ángeles, una nación más vigilante”, expresó James Featherstone, titular del Departamento de Manejo de Emergencias de la ciudad.