Garcetti asiste a acto en honor de los caídos en Boyle Heights
Eric Garcetti, el futuro alcalde de Los Ángeles, fue recibido con afecto por los angelinos reunidos para rendir homenaje a los latinos caídos en el este de LA
Vistiendo un impecable uniforme blanco, que lo distingue como reservista de la Marina, Eric Garcetti baja del podio para saludar a un veterano de guerra. De inmediato, se levantan decenas de celulares que captan la esbelta figura del alcalde electo de Los Ángeles.
“¡Alcalde Garcetti!”, le grita una voz desde la multitud que ha rodeado al concejal. Todos quieren retratarse con el hombre que en unos días estará al frente de la segunda ciudad más grande del país.
La luna de miel entre Garcetti y los angelinos comenzó en Boyle Heights: el funcionario ha elegido la conmemoración del Día de los Caídos -en el lugar conocido como Cinco Puntos- para acercarse por primera vez a sus constituyentes después de su triunfo en la pasada elección general.
“Me dio un beso, no me voy a lavar el cachete en más de un mes”, celebraba Eduwiges Chávez, como si hablara del gesto de un famoso actor de Hollywood. Ella se abrió paso entre la gente y logró estar cerca del edil. En su celular quedó grabado el encuentro.
“Todos quieren tomarse una foto con él, va a ser más famoso que los artistas, sobre todo que no es chocante [antipático], es bien nice”, comentó Chávez, quien espera un mejor futuro con su gobierno. “Tengo familiares indocumentados y él nos puede ayudar”, indicó.
Garcetti sigue siendo una persona accesible, amable, platicadora y dispuesta a esperar al último interesado en tomarse una fotografía con él. No faltaron los comentarios de mujeres que lo consideran atractivo, como para nominarlo a los “50 más bellos” de la revista People.
Felisa Rodríguez, una guatemalteca que vive en Boyle Heights, tuvo que formarse dos veces para retratarse con el alcalde electo: la batería de su cámara le jugó una mala pasada. Ya teniéndolo a un lado, le pidió ser mariscal del desfile de los centroamericanos el 15 de septiembre.
“Yo convencí a todas mis vecinas para que votaran por él. Les dije que iba a ganar”, comentó.
Garcetti fue a Boyle Heights para recordar a su abuelo mexicano, quien vivió en ese vecindario y se enlistó en el ejército para combatir en la Segunda Guerra Mundial y obtener la ciudadanía. “Él regresó, muchos no lo hicieron”, recordó el concejal de Hollywood.
El evento también tuvo uno de esos momentos incómodos de la política, como el encuentro de Garcetti con los aliados de su antigua rival en la carrera por la alcaldía (la contralora Wendy Greuel), el concejal José Huízar y el presidente de la Asamblea de California, John Pérez. Sólo Huízar lo felicitó en público.
“Espero que toda la energía de este día sea parte de un nuevo compromiso por Los Ángeles”, comentó a La Opinión el alcalde electo, haciendo una pausa a la sesión de fotos.
“¡Arriba el alcalde¡ ¡Y habla español!”, gritó alguien. “Y bien clarito”, completó la frase Eduwiges Chávez.