Ofensiva de ISIS contra Kobane deja 662 muertos en un mes
A un mes de que los yihadistas del Estado Islámico (ISIS) comenzaran sus combates en la ciudad kurda de Kobane, se han registrado más de 600 muertos, denunció el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El organismo sirio informó este jueves que al menos 662 personas han muerto desde hace un mes, cuando los extremistas del ISIS lanzaron su ofensiva en Kobane, en el norte de Siria y cercana a la frontera turca.
Entre las víctimas figuran 268 combatientes kurdos, 374 yihadistas y 20 civiles, de los cuales 17 fueron ejecutados por los extremistas -cuatro de ellos decapitados y el resto en ataques del EI contra Kobane y sus alrededores-.
En el bando de los kurdos, la mayoría eran miembros de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG), aunque también hay un voluntario kurdo y nueve rebeldes de otras facciones sirias que perecieron en combates, atentados y ataques de los extremistas.
El ISIS ha perdido a 374 milicianos en emboscadas, ataques contra sus vehículos y enfrentamientos contra los combatientes de YPG en Kobane y sus alrededores, incluidos cuatro que se inmolaron en la colina de Mashtana Nour, cercana a la ciudad.
El OSDH considera que la cifra real de fallecidos es el doble de lo que se ha podido documentar debido al “extremo secreto sobre las víctimas de ambos lados”, además de las dificultades para acceder a muchas zonas que han sido escenario de enfrentamientos y bombardeos.
Este jueves se cumple un mes de que los yihadistas comenzaron su ofensiva para tomar el control de la ciudad de Kobane y con ello afianzar su control sobre una amplia franja de territorio a lo largo de la frontera con Turquía.
Con el fin de detener el avance del ISIS, la coalición internacional encabezada por Estados Unidos ha lanzado decenas de bombardeos contra posiciones yihadistas en y los alrededores de Kobane.
En las últimas 48 horas, aviones de la coalición han realizado unos 50 ataques aéreos contra blancos yihadistas cerca de Kobane, el triple de la semana pasada, para poner fin al asedio de los extremistas en la ciudad.
El aumento de los bombardeos de la coalición internacional ha originado un retroceso de los yihadistas, lo que ha sido aprovechado por los combatientes kurdos para retomar el control de varias partes de Kobane.