Vendedores ambulantes piden moratoria a procurador de Los Ángeles
Quieren que dejen de juzgarlos como criminales mientras el Concejo de la Ciudad trabaja en un régimen para legalizar sus ventas
Cansados de que los procesen como criminales por vender comida en la calle, los vendedores ambulantes pidieron al procurador de la ciudad, Mike Feuer declarar una moratoria a los procesos en su contra mientras que el Concejo decide la suerte de una medida para legalizar sus ventas.
“Es justo que dejen de multarlos y procesarlos en tanto el Concejo trabaja en la ordenanza para crear un sistema que los legalice”, dijo Martin Terrores, líder de la Unión del Barrio.
El activista hizo ver que la misma petición de declarar una moratoria a la expedición de multas le hicieron al jefe de la policía Charlie Beck esta semana. “Al mes, les dan entre tres y hasta cuatro multas, cada una a pagar un mínimo de 300 dólares”, dijo Terrones.
Al procurador, los líderes de los ambulantes, le hicieron cuatro peticiones: cesar los procesos criminales contra quienes venden en las banquetas hasta que la Ciudad adopte una nueva legislación para legalizar sus ventas.
Le solicitaron desechar todos los casos pendientes contras las ventas en aceras y órdenes de arresto por no presentarse a comparecer en estos casos.
Le pidieron establecer un programa de servicio comunitario de cuatro horas por condena para los vendedores a cambio de los onerosos cobros que los sentencian a pagar. Sugirieron trabajar con el Departamento de Policía de Los Ángeles para implementar un protocolo de decomiso a los vendedores ambulantes que cumpla con la Cuarta Enmienda y el Debido Proceso.
Representantes de los vendedores de los ambulantes se reunieron ayer con el procurador Feuer a puerta cerrada para discutir la petición.
No hubo comentarios de la oficina del procurador sobre la petición de moratoria.