Fe no influye en voto latino
Los electores dan más importancia a la economía que a los temas eclesiásticos; religión del candidato tampoco es relevante
La lógica de Ronald Reagan en los años 80 indicaba que los latinos en Estados Unidos “eran republicanos pero aún no lo sabían”, debido a su filosofía conservadora respecto a la familia y la religión. Los republicanos de hoy aún repiten esta máxima como si de un sacramento se tratara.
No obstante, una nueva encuesta de votantes latinos realizada por ImpreMedia y Latino Decisions revela que a la hora de tomar decisiones electorales, la mayoría (53%) de estos latinos ciudadanos afirma que su religión no tiene gran influencia en su decisión de candidato, mientras que un 40% dice que sí la tiene.
La religión del candidato resulta igualmente irrelevante para un 55%, frente a 43% que sí le da importancia.
Aunque las cifras parecen bastante balanceadas, al desglosarlas se ve más claro: solo un 23% dice que su religión tiene un “gran efecto” y 19% indica lo propio sobre la religión del candidato. La única excepción a esta regla es entre los latinos que pertenecen al Partido Republicano: 47% dice que su religión sí tiene un efecto importante en sus decisiones electorales.
“Siempre se ha dicho que los latinos tienen un conflicto entre su religión y sus tendencias políticas. Que suelen ser más progresistas en política económica pero conservadores en temas sociales”, indicó Matt Barreto, profesor de la Universidad de Seattle en Washington y asesor de Latino Decisions.
Según Barreto, sin embargo, la encuesta refleja que no existe dicho conflicto. “La religión y los valores sociales y morales no están entre sus prioridades a la hora de realizar sus cálculos políticos y electorales”.
La encuesta confirmó que los votantes latinos le dan poca o ninguna importancia a los temas morales tradicionales a la hora de votar: 75% piensa que la economía, los trabajos y los impuestos son temas mucho más cruciales en política. Solo el 14% afirma que es más importante la temática moral o social como el aborto, el matrimonio gay o los valores familiares.
Irónicamente, esto es cierto tanto para los latinos demócratas como para los republicanos o independientes, para los nativos o naturalizados, para los que tienen diversos niveles socioeconómicos y para los que van todas las semanas van a la iglesia o se idenfican como born again o “renacidos”: los temas económicos mandan.
Por otro lado, hay temas morales en los que los latinos coinciden y que tangencialmente pueden tener efecto en su postura política: inmigración es uno de ellos.
“En esta encuesta hay una clara actitud moral de apoyo respecto a que las iglesias y líderes religiosos deben ayudar al inmigrante indocumentado aun si están en conflicto con las leyes”, apuntó Ricardo Ramírez, politólogo de la Universidad de Notre Dame. “Para ellos, ayudar a los indocumentados es un tema moral y puede que hasta religioso”.
Un 66% de los votantes latinos opina que las iglesias deben ofrecer este apoyo a los indocumentados, aun en desafío a las leyes, y solo 21% opina que no se debe ofrecer. Los latinos inmigrantes naturalizados tienden a tener posturas más fuertes al respecto: 75% dice que la iglesia debe ayudar y entre los latinos nacidos aquí el apoyo baja a 58%.
Pero incluso un 66% de los latinos republicanos y un 66% de los independientes tiene esta opinión.
Estos votantes tienden, en general, a querer que sus iglesias y la política electoral se mantengan bien separadas: abrumadoras mayorías de todos estos votantes opinan que ningún líder religioso, ministro o rabino debe decirles por qué candidato votar.
Interrogados sobre la religión del presidente Barack Obama y de uno de los principales contendientes republicanos, Mitt Romney, muchos de estos votantes manifestaron no saber a qué religión pertenecía ninguno de los dos: 48% dijo que no sabía a qué religión profesaba el presidente y 58% dijo lo mismo de Romney.
“No parece que a estas alturas los latinos estén muy interesados en la religión de estos candidatos”, dijo Barreto.
Curiosamente, un 12% de latinos dijo que Obama es musulmán y solo un 25% dijo correctamente que Romney es de la Iglesia Mormona o Santos de los Últimos Días.
Otra revelación de la encuesta es que los votantes latinos tienen una muy vaga idea de lo que es el mormonismo, un tema que probablemente será relevante en la elección general si Romney es el candidato republicano, aunque eso aún está por verse.
Un 58% no está familiarizado con el mormonismo, un 13% está muy familiarizado y un 27% solo un poco.
Un 40% dice, equivocadamente, que el mormonismo no es una religión cristiana y solo un 31% afirma que sí lo es. Otro 27% no sabe. Aunque la religión no parece tener un efecto positivo en el voto de los latinos, no está claro si pudiera tener un efecto negativo en votantes latinos republicanos o independientes.
“Al parecer el mormonismo no está definido en las mentes de estos votantes. Esto puede ser bueno o malo para el candidato republicano si este es Romney, porque es seguro que este tema surgirá en la competencia”, indicó el profesor de gobierno de Cornell University, Michael Jones Correa. “A mayor definición de lo que es la religión mormona, puede haber beneficios o perjuicios para Romney, dependiendo”.