Santorum paga más impuestos que Romney
Santorum revela declaración de impuestos, en la que paga el doble que Romney
WASHINGTON (EFE).- El aspirante a candidato republicano a la Casa Blanca, Rick Santorum, reveló hoy su historial de impuestos de entorno a los 250 mil dólares anuales sobre unos ingresos de cerca de 900 mil dólares al año en el periodo 2007-2010.
Según el asistente de campaña de Santorum, Greg Rothman, la tasa impositiva del precandidato y exsenador de Pennsylvania durante estos 4 años se ubicó entre el 25 % y el 28,3 %.
La declaración de impuestos de Santorum, que en las últimas encuestas aparece con un empate técnico junto a Mitt Romney a la cabeza de la primarias republicanas, muestra un tope de ingresos de 1,1 millones de dólares en 2009, por los que pagó 310,000 dólares en impuestos.
En la declaración conjunta con su esposa Karen, figuran como dependientes sus siete hijos, y arroja unos pequeños beneficios como resultado de un paquete de acciones en la compañía sanitaria United Health Services, de la que fue miembro del consejo directivo.
La mayor parte de sus ingresos, no obstante, se debe a “consultoría y charlas”, desde que dejó el Senado en 2006.
Estos porcentajes se sitúan en el rango de lo que paga un estadounidense medio, que ve gravada su nómina en torno al 23 % y, si lleva a casa un sueldo por encima del medio, puede pagar hasta un máximo del 35 %.
De este modo, Santorum registra unos ingresos muy por debajo de lo declarado por sus inmediatos contendientes en la batalla por la candidatura republicana- el exgobernador de Massachusetts, Mitt Romney, y el expresidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich.
Gingrich reveló unos ingresos de 3,1 millones de dólares en 2010, sobre los que pagó 994,000 dólares en impuestos, una tasa del 31%.
Por su parte, Romney, hizo públicos sus ingresos en 2011, en los que registró 21 millones de dólares, y pagó 3,2 millones al fisco, lo que supone una tasa del 14,5 %.
El gran volumen de ingresos de Romney y la baja tasa de impuestos generó numerosas críticas entre sus contrincantes y parte del electorado republicano, que lo consideran como un aspirante acaudalado y distanciado por tanto de los problemas reales del ciudadano medio en un momento de crisis económica.
La distancia de la tasa de Romney respecto a la de los demás, casi el doble, se explica por la diferencia impositiva que se aplica en EEUU a los ingresos por salario, mucho mayor que la que se emplea a los ingresos obtenidos por inversiones de capital.
El propio Romney indicó que en los últimos diez años sus ingresos provinieron “mayoritariamente de inversiones realizadas en el pasado”.