La Villita y Pilsen demandan a empresa contaminadora
Reclaman compensación porque los olores y la contaminación les niegan el derecho de gozar de sus propiedades
Chicago, 21 de Febrero – Vecinos de dos barrios latinos afectados por la emisión de gases de dos plantas que producen electricidad con carbón en Chicago presentaron una demanda colectiva contra la empresa propietaria en la que reclaman compensación porque los olores y la contaminación les negarían el derecho de gozar de sus propiedades.
“No estamos hablando de problemas de salud, como las cuestiones respiratorias, sino estrictamente de daños a la propiedad”, dijo hoy a Efe el abogado Arturo Jáuregui, quien representa a los demandantes.
“Si abren las ventanas los invade el olor a huevo podrido, las contaminantes manchan las cortinas y los muebles exteriores se percuden”, agregó.
En documentos presentados la semana pasada en la corte del condado Cook, los querellantes se presentan como residentes en un área de una milla a la redonda de las plantas Fisk y Crawford, en los barrios latinos La Villita y Pilsen.
Sostienen que la contaminación afecta a 21,786 hogares con un total de 76,857 personas.
“Los precios de la propiedad cayeron en picada, porque nadie quiere comprar una casa si tiene un vecino que quema basura 24 horas diarias, durante todo el año”, dijo Jáuregui.
“Es lo que hacen las plantas, autorizadas por el Gobierno pero no por el barrio”, afirmó.
La empresa demandada es Midwest Generation, que además de operar las dos plantas de Chicago está a cargo de generadoras de electricidad en otras ciudades de Illinois como Waukegan, Joliet, Romeoville y Pekín.
Midwest, que es una subsidiaria del Edison Mission Group de Santa Ana, California, se estableció en 1999 en Illinois después de adquirir las seis plantas de energía del estado que funcionan con carbón.
En la demanda se afirma que Midwest ha sido objeto de quejas “numerosas y constantes” de residentes de las áreas afectadas, organizaciones comunitarias y ambientalistas, así como de acciones gubernamentales.
“Nada ha conseguido que la parte acusada detenga la operación impropia de sus plantas o cese la invasión de las propiedades de los demandantes con contaminantes, olores, químicos y partículas dañinas”, agrega el escrito.
Jáuregui afirma en la demanda que a pesar de existir tecnología disponible, Midwest “no hizo nada para reducir o eliminar las emisiones”.
Susan Olavarría, directora de comunicaciones de Midwest en Chicago, dijo a Efe que la empresa prefería no hacer comentarios sobre demandas pendientes.
Sin embargo, destacó que “estamos muy orgullosos de nuestro liderazgo ambiental”, y afirmó que se ha invertido de manera continua en la reducción de emisiones en esas plantas “desde que asumimos la propiedad, hace 12 años”.
Olavarría señaló que Midwest completó a fines del año pasado la instalación de nuevos controles de contaminación para cumplir con las normas estatales que rigen desde el 1 de enero de 2012, y con la regulación de emisiones de contaminantes peligrosos del aire que entrará en vigor en 2015.
La portavoz dijo que le empresa ha invertido en controles adicionales de contaminación, entre ellos “sistemas de reducción no catalítica selectiva” que disminuyen las emisiones de óxido de nitrógeno.
Los nuevos controles permitirían que Midwest cumpla con los límites de emisión establecidos por Illinois y la Agencia de Protección del Medio Ambiente de los Estados Unidos (USEPA), agregó.
Grupos ambientalistas presionan en el Concejo Municipal de Chicago por una ordenanza sobre energía limpia, que apuntaría a las plantas Fisk y Crawford.
Según la Coalición a favor del Aire Limpio, el 72% de las personas consultadas en una encuesta reciente opinó que la municipalidad debería tomar medidas para limpiar el aire o cerrar las plantas que funcionan con carbón.
Los ambientalistas afirman que la contaminación de esas plantas sería responsable de 42 muertes prematuras, 66 ataques cardíacos y por lo menos 720 crisis asmáticas todos los años, según estudios realizados desde 2001 por la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard.