Sin rastro de cómo se usaron $7 millones en combustible
Reporte detecta el problema y revela, entre otros puntos, que no existe ningún tipo de registro del lugar a donde se dirigían los vehículos oficiales
Autoridades de Los Ángeles se preguntaban hoy a dónde fueron sus empleados con los millones de galones de combustible que, a costo de los contribuyentes, obtuvieron de distintas estaciones del Ayuntamiento y que no reportaron adecuadamente.
Uno de los temores es que algunos trabajadores sin escrúpulos hayan llenado inapropiadamente el tanque de sus coches personales, por lo cual pidieron una investigación a fondo.
Un reporte de la Contraloría Municipal publicado esta mañana detectó que el equivalente a $7 millones en gasolina, diesel y gas natural se bombeó de decenas de sitios de abastecimiento para vehículos oficiales (similares a las estaciones comerciales) sin ningún tipo de registro del lugar a donde se dirigían los empleados o del propósito del traslado.
Cada año, el gobierno de Los Ángeles adquiere 13.8 millones de galones de combustible, a un costo de $28.6 millones, para abastecer camionetas, autos compactos, helicópteros, camiones de basura, así como patrullas y lanchas de la Policía.
La auditoría descubrió que la mayoría de los departamentos de la ciudad de Los Ángeles fallaron en su compromiso de dar seguimiento al uso del combustible. De hecho, ignoraron un sistema que, para ese propósito, adquirieron por $12 millones hace una década.
“Mi auditoría revela que hay una tremenda falta de supervisión cuando se trata de consumo de combustible en la ciudad”, dijo la contralora de la ciudad, Wendy Greuel. “No estamos hablando de lapiceros, sino de combustible”, dijo la también candidata a la Alcaldía de Los Ángeles.
El reporte de la Contraloría se condujo en un período de 22 meses, cuando miles de angelinos se han volcado a las estaciones del transporte público por los elevados precios de la gasolina. Hoy, el precio promedio de un galón se vende a $4.35 en esta región, según el Club de Automovilistas (AAA).
Pero algunos empleados del Ayuntamiento sólo deben colocar el número del vehículo que les confió el municipio o pasar una tarjeta especial para obtener cualquier cantidad de combustible, en los 141 sitios de abastecimiento, la mayoría localizados en estaciones de Policía (22) y de Bomberos (68).
“Lo que tenemos aquí es un problema que se ha exacerbado por el hecho de que los líderes de la ciudad no están participando en una administración responsable”, reclamó Greuel. “Los contribuyentes esperan más y merecen algo menor. Es necesario que exista responsabilidad por el desvío de más de $7 millones en transacciones para combustible desconocidas”, indicó.
La auditoría reveló también otros problemas, como 94,000 transacciones sospechosas en las que la lectura del odómetro de los coches en el momento del consumo de combustible fue menor al que se había reportado en el abastecimiento anterior.
Por ello, la Contraloría ha recomendado crear un equipo especial en el Departamento de Servicios Generales que se encargue de supervisor el consumo del combustible, restringir el uso de teclados para abastecimiento, mantener registros de cada bombeo, conducir inventarios físicos regularmente y realizar una investigación a fondo (la auditoría sólo abarcó cinco departamentos).
“Insto a los líderes de la ciudad a que realicen una reunión sobre mi auditoría tan pronto como sea posible, de manera que los fracasos de la ciudad con respecto a la forma de obtener combustible puedan ser resueltos de inmediato”, pidió Greuel.