Tribunal: Jennifer Hudson no recibe trato de estrella
"En lo absoluto", dijo Irv Miller, uno de los oficiales de enlace del juez en el juicio, que se encuentra en su segunda semana
CHICAGO – Jennifer Hudson llega todos los días al juicio del hombre acusado de matar a tres familiares cercanos acompañada de guardaespaldas. Usa una entrada secreta para evadir a los fotógrafos, come en privado y espera el inicio de cada sesión en salas del juez normalmente vedadas.
La actriz ganadora del Oscar, recientemente nombrada una de las 50 mujeres más bellas por la revista People, se escabulle de la corte durante los testimonios más crudos.
¿Está recibiendo un trato especial de estrella?
“En lo absoluto”, dijo Irv Miller, uno de los oficiales de enlace del juez en el juicio, que se encuentra en su segunda semana.
La mayoría de las atenciones, insistió, son cortesías que se suelen tener con las víctimas que pasan por la terrible experiencia de un juicio por homicidio. Otras, reconoció, son necesarias debido a la fama de Hudson, finalista de “American Idol” en 2004 y ganadora de un Oscar en 2007 por su trabajo en “Dreamgirls”.
“Su categoría de estrella implica que las cosas se hagan un poco diferente”, dijo. “Simplemente una celebridad no puede andar caminando por todas partes o ir a la cafetería, la gente correría a pedirle autógrafos”.
Sin embargo, algunos opinan que la corte ha ido demasiado lejos.
“Es indignante”, dijo Manny Medrano, un abogado defensor que trabaja en Los Angeles y ex reportero de televisión quien suele comentar sobre casos de alto perfil. “Le da un mensaje equivocado al mundo de que si eres famoso no te tratarán como a los demás”.
Su trato podría ser el resultado de la relativa falta de experiencia en Chicago con casos de famosos. En el sur de California, dijo Medrano, la gente espera que las celebridades sean tratadas igual que todos en la corte.
El malestar del juez en el juicio de Hudson es evidente. Pasa meses compilando reglas de decoro especial, incluyendo la prohibición de twittear desde la corte, y parece seguir cada paso de los periodistas desde su sala del tribunal. Recientemente echó a una reportera por medio día tras verla sosteniendo un bolígrafo al costado de la boca, considerándola una distracción.
Los únicos ejemplos recientes de astros en las cortes penales de Chicago son el juicio de 2008 del cantante de R&B R. Kelly por pornografía infantil y una ocasión en la que Oprah Winfrey sirvió como jurado en un caso de asesinato en el 2005.
A Winfrey se le permitió usar una entrada secreta. R. Kelly, cuyo juicio y eventual absolución se realizaron en la misma sala en la que se disputa el caso de Hudson, entraba y salía por la misma puerta que todo el mundo.
Miller dijo que el trato a Kelly no puede compararse con el de Hudson.
“Hudson no es una acusada, es una testigo de la fiscalía”.
Agregó que no es raro que los testigos entren por una puerta trasera cuando se trata de un juicio delicado.