Funes intercede por los pandilleros salvadoreños
Pide a los empresarios unirse para fomentar la creación de empleos
Funes sostuvo que el gobierno no “ha negociado beneficios con los líderes de las principales pandillas”. Crédito: Archivo/La Opinión - / J. Emilio Flores
San Salvador, 2 May – El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, pidió hoy la colaboración de los empresarios para la creación de empleos, como parte de un acuerdo nacional para frenar a las pandillas y combatir la violencia e inseguridad.
Funes pidió a los empresarios crear junto al gobierno las condiciones para fomentar empleo y oportunidades a través de un plan para insertar en el trabajo a los pandilleros, quienes en su mayoría vienen de lugares muy pobres y viven de las extorsiones.
El llamado del gobernante se dio durante una reunión con empresarios, como parte de una serie de encuentros con distintos sectores sociales para consensuar un acuerdo que permita poner fin a la violencia que afecta al país.
La cita congregó en la Casa Presidencial a los dirigentes de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (Anep), que reúne a las compañías más grandes de la nación, y a la Asociación de Industriales Salvadoreños (ASI), entre otras.
Funes explicó que lanzó la convocatoria a la sociedad civil en abril pasado, tras darse a conocer que las dos mayores pandillas del país habían acordado una tregua, con mediación de la Iglesia católica a propuesta del obispo castrense Fabio Colindres.
Sin embargo, los empresarios y otros sectores han expresado sus reservas, e incluso la Anep exigió al mandatario aclarar la situación de la tregua entre pandillas.
Al respecto, Funes reiteró ante el empresariado que “el gobierno no ha intervenido en ninguna forma en esta negociación”, ni “ha negociado beneficios con los líderes de las principales pandillas”.
Admitió que “para operativizar (esa tregua), la Iglesia católica solicitó la colaboración” del Ejecutivo, que consistió en permitir la entrada de Colindres al penal de máxima seguridad de Zacatecoluca, y la facilitación de traslados de líderes de pandillas a otras cárceles.
Aseguró también que el retiro reciente de los militares que se encargaban de la seguridad interna de las cárceles no es una concesión a los líderes de las pandillas, sino porque ya hay custodios capacitados para ello.
Funes dijo a los empresarios que el gobierno no ha renunciado a la represión contra estos grupos, y una prueba es la reciente creación de la unidad antipandilla de la Policía Nacional Civil (PNC), que trabaja en 29 zonas de alto riesgo.
Explicó que la tregua entre pandilleros, concretada en marzo pasado, ha dado resultados, ya que los homicidios en abril pasado cerraron con 55% menos que el mismo mes de 2011.
Consideró que esa reducción se debe a que en el país el mayor número de homicidios o ejecuciones se da entre pandillas y la tregua de no agredirse entre las dos maras rivales iba a generar menos asesinatos.
Funes consideró que hay que darle estabilidad a esta nueva situación, porque no se puede depender del pacto de las pandillas, ya que si se termina se volverá a los niveles de homicidios de hasta 14 por día.
