Gael García Bernal dominado por la ira en “Ciudades desiertas”

El actor Gael García Bernal será dominado por la ira en “Ciudades desiertas”, adaptación cinematográfica de la novela homónima de José Agustín, que dirige Roberto Sneider (“Dos crímenes”, 1995; “Arráncame la vida”, 2008).

“Mi personaje reacciona de manera intempestiva. Su diablo puede más que sí mismo, su diablo le gana, lo cual pasa en todas la relaciones, todos los sentimientos más enterrados entre dos personas”, explicó el actor a Notimex durante un descanso de la filmación.

“Ciudades desiertas”, escrita en 1982, narra el trayecto que “Eligio” (Gael García) deberá hacer para recuperar a “Susana” (Verónica Echegui), quien fastidiada del aburrimiento, la rutina y el conformismo de su matrimonio, decide irse a Estados Unidos sin avisarle a su pareja.

Allá participa en un programa de escritores con la esperanza de que le publiquen su novela; luego de tres meses de estancia sostiene una aventura sexual con un polaco, provocando los celos y la ira de “Eligio”.

De acuerdo con la sinopsis de la producción, el largometraje abunda en el viaje que un chilango ilustrado hace al centro de la Unión Americana, a su rígida sociedad, a un invierno helado; pero sobre todo es un viaje interior, a enfrentar las contradicciones entre el amor que siente por su mujer y la idiosincrasia machista que arrastra.

Gael García (“Amores perros”, 2000; “Babel”, 2006) encarna a un actor, situación en la que nunca antes había estado en su carrera.

“Me divierte mucho hacerla de actor, creo que es uno de los goces más grandes que uno, dedicándose a esto, puede tener. Jugar con el mundo de los actores es un universo con el cual crecí, se me hace una vida muy divertida.

“Los actores son gente muy curiosa, se salen con la suya porque a final de cuentas actúan interpretando a otros personajes y están exentos en todos los modales de mesa. Deberíamos, como ellos, ejercer esa posición clara de ser más filosos”, comentó.

Hace 15 años, Gael se topó por primera vez con “Ciudades desiertas”, leyó la historia de José Agustín y le pareció fascinante e incluso le gustaría conocer personalmente a su autor. “Hubo muchas personas que querían hacer esta película”, comentó.

El histrión refirió que Roberto (Sneider, el director) le llamó hace cinco años para presentarme su idea y hasta hoy se dio el tiempo de encontrarse; “estoy muy contento de estar filmando esta película aquí en México, donde no trabajaba desde Rudo y cursi (2008)”.

En un aula del edificio E, de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), plantel Azcapotzalco, se filmaron varias escenas con extras y donde “Eligio” pretende localizar a “Susana”.

“Es el primer lugar donde él la busca porque ella da clases ahí, pero no la halla. Es aquí donde empieza el brote del desmadre”, destacó.

Además de locaciones en la capital de México, la trama también se desarrolla en escenarios de Winnipeg, Canadá, donde ya se filmaron algunas secuencias y a la que en dos semanas el elenco regresará para hacer tomas sobre la nieve con el diseño de producción de Eugenio Caballero, ganador del “Oscar” por “El laberinto del fauno” (2006).

“En Winnipeg hace bastante frío, pues en octubre pasado estábamos a menos tres grados, pero lo hacemos con muchas ganas aunque nos muramos de frío”, sostuvo García Bernal.

Admitió que “Eligio” tiene mucho de él tan sólo porque ambos ejercen la misma profesión; sin embargo, “nos diferencia el hecho de que yo no he vivido lo que él ni él lo que yo”.

Para el histrión es muy prematuro hablar acerca de cómo terminará la película y los personajes, no obstante le gustaría que la metáfora de ciudades desiertas esté muy presente.

“Lo divertido del cine es que uno lo filma y luego ve qué tal quedó. Lo que ahora pueda decir sobre la película es pura chaqueta”, concluyó García Bernal.

El guión de “Ciudades desiertas”, con una inversión aproximada de cinco millones de dólares, es de Roberto Sneider y Luis Cámara; la fotografía, de Antonio Calvache, bajo la producción de Cuevano Films S.A. de C.V. y La Banda Films. También actúan Ashley Hinshaw (Irene), Hlynur Haraldsson (Slawomir) y Barbara Garrick (Becky).