SAN SALVADOR, El Salvador.— Los mediadores de la “tregua” entre pandilleros solicitaron ayer al Parlamento de El Salvador que reforme o derogue la ley antipandillas para que no “entorpezca el desarrollo” del armisticio, que desde marzo pasado ha ayudado a disminuir los homicidios en aproximadamente un 60%.
“Hemos pedido revisión o derogación de aquel marco legal que entorpezca el desarrollo de este proceso” de “tregua”, declaró a la prensa Raúl Mijango, uno de los mediadores del pacto y exdiputado del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
La Ley de Proscripción de Pandillas, vigente desde 2010, prohíbe las pandillas y está aparejada a una reforma del Código Penal que sanciona hasta con 20 años de cárcel la pertenencia a esos grupos, que suman unos 64 mil miembros en el país, según la Policía.
El presidente salvadoreño, Mauricio Funes, propuso dicha legislación a raíz de que el 20 de junio de 2010 unos pandilleros incendiaron un autobús con sus pasajeros a bordo en un hecho que dejó 17 muertos.
Ese mismo día fue atacado a tiros otro vehículo del transporte colectivo, lo que se cobró tres vidas.
Los mediadores de la “tregua” también propusieron al Parlamento revisar y modificar el Código Penal y la Ley Penitenciaria, entre otras.
La “tregua” entre las principales pandillas o maras que operan en este país centroamericano (Mara Salvatrucha y Pandilla 18) hasta el momento consiste en un cese de las hostilidades entre ellas, y ha redundado en una bajada de los homicidios en un 60%, ya que el promedio diario ha pasado de 14 a alrededor de cinco, según datos de las autoridades.