Vuelve Khan a primer plano

Amir Khan presentó y aprobó un buen examen anoche en la Memorial Sports Arena, al derrotar por nocaut (decisión médica) en 10 asaltos a un combativo Carlos Molina que resultó un rival de mucha más talla y más cuidado que lo que se preveía en la víspera y de paso ganar el título welter interino del CMB.

Las combinaciones precisas a la cabeza por parte de Khan eran su principal arma, pero Molina lanzaban un volado de zurda por afuera, que recordaba el golpe con el que Danny García lo noqueó cuando era dominado por el británico.

Eso era lo predominante en tres asaltos, todos ganados por Khan, pero sin lastimar de manera clara a su enemigo. Porque todo lo contrario, a lo obvio, Molina recibía castigo, pero iba para adelante a buscar espacios en la defensa de su rival para meter una mano decisiva.

Con la grada a su favor de manera masiva, Molina echó mano de su valor para nivelar un combate que en lo preliminar debía ser para su rival, Amir Khan.

Molina estaba para morir de pie y aún cuando ya sangraba profusamente del párpado izquierdo, frutos de la mano derecha de Khan.

La velocidad de Khan controlaba la embestida del angelino que antes de calzarse los guantes para este pleito no había conocido la derrota en 17 combates.

Molina ya había recibido todos los golpes buenos Khan y no lo había podido tirar a la lona, por eso calculaba el riesgo y se arrimaba.

Khan mantenía arriba, como religión, su guante derecho para quitarse la izquierda amenazante y evitar un fiasco en la pelea que no podía perder.

En el noveno episodio Molina seguía sangrando de su párpado izquierdo y perdía en las tarjetas que sólo le quedaba la posibilidad de hacer un milagro en la noche angelina y noquear a Khan.

Tenía sus cuentas el mexicano y sabía que debía jugarse todo, pero hasta allí llegaría su acto de valor porque apenas llegar a la esquina al cierre del décimo, el juez y el médico estimaron que no podía continuar y terminó la pelea.

El mexicano Alfredo “Perro” Angulo pasó algunas dificultades frente al joven tijuanense Jorge “Pantera” Silva, pero finamente pudo hacer lo suficiente para ser el ganador por decisión unánime en combate a 10 asaltos.

Temprano en el primer asalto, Angulointentó hacer de las suyas y conectó, pero Silva respondió y le dejó lo suyo al de Mexicali sobre todo cuando trabaron en el hierro corto.

Ya en el segundo, “Perro” Angulo encontró más espacios y se agenció el asalto imponiendo su mayor prestancia física y golpeo al cuerpo.

Visto que no podía lastimarlo con golpes a la cabeza, Angulo empezó a lastimar en las zonas blandas y camino a la mitad del combate y con la tribuna a su favor empezó a tomar control del pleito.

Eso sí, siempre pagando tributo porque recibía las manos rápidas del tijunanse en su rostro, quien marcaba puntos y daba la batalla.

Era un buen examen para “Perro” Angulo que con seis asaltos en las tarjetas ganaba la pelea, pero no era la fuerza dominante en el ring.

En el 7, “Pantera” Silva lucía entero y Perro Angulo caminaba en busca de su enemigo.

Silva, de sólo 20 años, se plantaba con un hombre como Angulo a quien todos miran como futuro campeón mundial y listo para facturar millones en las 154 libras.

Ganaba por poco en las tarjetas Angulo y en el noveno pudo mantener su diferencia a favor en una pelea que se jugaba completa en el último giro.

Lo cerró mucho mejor Angulo, que dominó claramente y sólo le faltó el nocaut.

Los jueces la calificaron así: 97-93, 97-93 y 97-93 todos para “Perro” Angulo.

En la primera pelea coestelar, el campeón mundial Leo “Terremoto” Santa Cruz cumplió con un buen ejercicio para dominar a un enjundioso Alberto Guevara por decisión unánime y así retener su título de los gallos versión de la FIB.

Tuvo un buen inicio Guevara, quien dominó los dos primeros asaltos con rapidez de manos, mucha movilidad y combinaciones arriba y abajo que confundían a Santa Cruz.

Parecía cuajar para gran combate, pero el campeón se hizo cargo de la situación y con sus brazos largos y su mejor alcance, tomó control de a poco para cambiar el itinerario del pleito.

Fueron varias las ocasiones en las que Santa Cruz parecía tener el nocaut a su alcance, pero dosificaba esfuerzos como si estuviera conforme con las ventajas que llevaba.

En las tarjetas de los tres jueces el campeón dominó los cuatro saltos finales para consolidar una victoria convincente por decisión unánime.

Los jueces marcaron 112-116, 110-118 y 109-119

En combate disputado en las 147 libras, Julio Díaz, de Indio, California, y Shawn Porter, de Ohio, entregaron una de las mejores peleas de la noche, ya que se prodigaron a lo largo de los 10 asaltos pactados al intercambiar golpes bien y bonito.

La velocidad y la versatilidad de Porter fueron dominantes en el inicio, pero Díaz asimiló los mejores golpes de su enemigo y le fue dando vuelta para equilibrar el combate cuando se habían peleado 6 asaltos.

Con diferencias exiguas fueron al décimo y último asalto en el que otra vez dejaron todo y los jueces fallaron de la siguiente manera: 96-94 para Porter; 96-94 para Díaz y 95-95, para consolidar un empate que hizo justicia con el esfuerzo de los dos en el tinglado.