Nick Cave no cree que sea como Leonard Cohen

MÉXICO, D.F.— Nick Cave admite que le incomodan las comparaciones con Leonard Cohen.

“Me resulta muy difícil cada vez que me comparan con Leonard Cohen. Él es alguien que está muy por encima de mí, así que esas comparaciones me parecen absurdas… Digamos que Tom Waits podría ser un músico más a mi nivel”, dijo Cave el lunes, durante el encuentro que el músico australiano tuvo con estudiantes en el Museo Universitario del Chopo de la capital mexicana donde presentaba su nuevo álbum Push the Sky Away.

Cave reconoció sin embargo la enorme influencia que la música de Cohen tiene en sus canciones, especialmente el álbum Songs of Love and Hate, de 1971. “Ese disco me cambió la vida radicalmente, cuando era un joven que vivía en un pequeño pueblo en Australia”, recordó.

Irónicamente, al igual que la música y el trabajo literario de Cohen, el de Cave es objeto de tesis y estudios universitarios.

“El otro día leía un ensayo académico donde decían que mi manera de moverme en el escenario es medio gay, lo cual me pareció curioso. Me pregunto cómo es que hacen estudios en las escuelas sobre mi voz y mis movimientos si mi voz es tan fea”, dijo Cave en tono bromista.

“En todo caso, creo que mi voz es expresiva, pero mi entonación es pésima”, añadió el músico de 55 años.

En una charla relajada, en la que Cave habló sobre su faceta como escritor, actor y guionista fílmico, el rockero contó que en su adolescencia soñaba con ser artista plástico, pero abandonó su anhelo cuando llegaron sus calificaciones de pintura.

“En segundo año de la carrera, reprobé y ahí acabó el sueño. Entonces me convertí en músico de un grupo punk [The Boys Next Door]. Digamos que me convertí en escritor porque no soy un gran pintor”, dijo

Influido por músicos como el propio Cohen, Lou Reed, David Bowie, Alice Cooper y Roxy Music, Cave comenzó una fructífera carrera en la música a mediados de la década de los años 70, con líricas que impactaron por su tono poético.

Con el tiempo su pasión por la literatura y la poesía le llevó a escribir dos novelas, King Ink y The death of Bunny Munro, de 1988 y 1989, respectivamente.

“Mi objetivo principal es escribir canciones, todo lo demás es extracurricular… Creo que nadie puede hacer buenos discos a menos de que se enfrente a otros retos, en mi caso a la literatura”, dijo.

Como un artista multidisciplinario, Cave también ha incursionado en el mundo del cine como actor en los filmes Wings of Desire, de Wim Wenders, y Ghosts… of the Civil Dead, de John Hillcoat.

En su faceta como compositor de música para películas, el australiano trabajó en las cintas The Road y The Preposition, en la cual también fue guionista. “John [Hillcoat] me invitó porque había intentado escribir un western australiano, a mí me pareció una idea interesante y acepté”, recordó.

El autor de las canciones The Good Son y Song of Joy agradeció el premio Ariel que la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas le otorgó el año pasado por su participación en la banda sonora de la película mexicana Días de gracia del realizador Everardo Gout.

“Me dieron una estatuilla que es como un premio Oscar pero grandote y que guardo con cariño en casa”, reveló.

Tras su paso por México, Cave, quien ha vendido más de cinco millones de copias de su discografía, ya está enEstados Unidos donde continuará su gira que incluye sus presentaciones en los dos fines de semana del festival Coachella, en Indio, California, los domingos 14 y 21 de abril.