‘Chucho’ impulsó su grandeza en medio de la pobreza
Christian Benítez se crió con su abuela ante la ausencia de su padre, pero siempre inmerso en el mundo del fútbol
Guayaquil, Ecuador.- Basta escuchar a la madre de Christian ‘Chucho’ Benítez para saber que desde su niñez, el gran jugador ecuatoriano, fallecido esta semana en Catar, fabricó un mundo de grandeza impulsado por un deseo ardiente por el fútbol, aunque en medio de la pobreza.
“Cuando tenía 8 años, ‘el Chucho‘ narraba goles imaginarios, partidos ficticios, situaciones de juego en las cuales él era la figura”, cuenta Rita Betancourt cuando habla de su hijo a periodistas.
“¡Se va ‘el Tanque’ Hurtado por la derecha, va a centrar, atención, cuidado que viene Christian Benítez, patea Christian y gol, gol de Christian Benítez!”, así presagiaba desde niño sus hazañas, según su madre que ahora cuenta a los reporteros con nostalgia las anécdotas de su hijo.
“Siempre era la figura, el goleador del equipo y siempre se elogiaba más de la cuenta”, resalta la madre del ‘Chucho’, que falleció por una insuficiencia cardiaca a los 27 años de edad y en el mejor momento de su carrera.
De niño, “utilizaba muchos adjetivos positivos para él: ¡Qué gran jugador! ¡Cómo hizo ese golazo!”, pensamientos constantes e intensos que se materializaron en el futuro, señala la madre, que cuando su hijo tenía 10 años tuvo que emigrar a Italia en búsqueda de un mejor porvenir.
Por ello ‘el Chucho’ se crió con su abuela, Dorsi López, ante también la frecuente ausencia del padre, el también exjugador Ermen Benítez, siempre inmerso en el mundo del fútbol.
Esas ausencias no impidieron que continuara tejiendo, con una fe inquebrantable, el anhelo de éxito.
A los 16 años ya debutó como jugador profesional en El Nacional, cantera de grandes futbolistas ecuatorianos, y su imagen empezó a labrarse en la mente de los ecuatorianos, tanto pos sus excelentes condiciones técnicas, como por su calidad humana coronada con una eterna sonrisa, de esas que sensibilizan, que contagian.
Debutó con El Nacional en 2004 y al año siguiente se proclamó campeón con el equipo, hazaña que repitió en 2006.
Su potencia física, astucia en el área contraria y vehemencia por conseguir anotar, lo llevaron a vestir en el 2007 la camisa del Santos Laguna mexicano, y en 2009 pasó al inglés Birmingham City.
Con el club británico sólo concretó 4 anotaciones en 44 partidos, pero dos de ellos bastaron para dejar fuera de la Copa al Everton. El entrenador del Birmingham, Alex Mc Leish, calificó esos tantos como “dos goles con clase”.
En su regreso al Santos Laguna, en 2010, anotó 20 goles en 21 partidos, esa producción le abrió las puertas del América, uno de los equipos más populares de México.
Con la divisa americanista se convirtió en ídolo, pues sus 52 goles contribuyeron para que el cuadro obtuviera la corona en 2013, que llevaba varios años sin alcanzarla.
Con El Nacional ecuatoriano, ‘el Chucho’ disputó 75 partidos y marcó 20 goles; durante el primer periodo con el Santos Laguna hizo 31 goles en 58 encuentros.
Con el Birmingham inglés disputó 44 partidos y marco 4 goles; entre 2010 y 2011 jugó 21 partidos con el Santos Laguna y anotó 20 goles; mientras que entre 2011 y 2013 jugó 58 partidos y convirtió 52 goles con el América.
El ‘Chucho’ fue el mejor jugador del campeonato ecuatoriano 2006, del torneo Clausura de México 2008, goleador del torneo Apertura en 2010, también del Clausura en 2012.
Asimismo, fue goleador del torneo Apertura de México 2012, cuando también fue declarado el mejor jugador de esa liga; y el máximo artillero del Clausura 2013.
El último club al que se vinculó Benítez fue al qatarí Al Jaish SC, en el que debutó el pasado domingo. Al día siguiente falleció por un problema de paro cardiaco, con solo 27 años de edad.
La selección de Ecuador tuvo en Benítez a uno de sus mejores exponentes en los últimos tiempos, con la que participó en el Mundial de Alemania 2006.
Con su participación, Ecuador ha logrado mantenerse en la zona de clasificación de las actuales eliminatorias al Mundial de Brasil 2014.
Como un homenaje a su memoria, sus compañeros de la selección han prometido hacer todo lo posible por conseguir esa clasificación, que era otro de sus sueños.