Espinoza Paz no tiene nada que esconder
Espinoza Paz habla de las diferencias con su representante, y de lo liberado y feliz que se siente
Espinoza Paz (México, 1981) pasó de ser un “hombre normal” a un hombre feliz, liberado y renovado.
Ya no piensa retirarse de los escenarios, como dijo el año pasado. Al contrario, ahora es cuando más disfruta estar en ellos. Asegura que está disfrutando de su libertad y de no recibir órdenes.
Esa renovada energía se debe al distanciamiento que tiene con su mánager, Martín Fabián, presidente y CEO de Nueva Generación Music Group, que tiene la representación de varios artistas.
“Ahorita tengo un poco de libertades que antes no tenía. Ya no tengo pañal, yo quiero platicar […] me sentía que… [tenía que pedir permiso]: ‘¿puedo ir para allá?, no. ¿Puedo ir para acá?, no’. Entonces, ahorita ya estoy libre, estoy más contento, tengo ganas de aparecer y decir aquí estoy”, expresó el también llamado “Cantautor del Pueblo”.
El viernes, una hora antes de su presentación en el Nokia Theatre, se quiso reunir con la prensa.
Se le ve bien.
Parlanchín, animoso, explicando con ejemplos su estado de ánimo y respondiendo sin evasiones a las preguntas de la prensa, aunque en un principio se intentó limitar la entrevista a preguntas sobre su presentación de esa noche y sus próximos proyectos.
“No tengo nada que esconder”, comentó.
Espinoza Paz explicó que la separación entre Fabián y él es un proceso natural y la comparó con la relación de un padre cuando cría a su hijo y llegado el momento éste crece y se tiene que ir.
“Estamos en pláticas de poder acomodar las cosas juntos”, dijo. “Hicimos buenas cosas y espero que se acomoden para seguir trabajando”.
El intérprete de El último viernes, aclaró que Fabián y él “no estamos peleados. No hay nada. Estamos reacomodando todo para ver qué necesito yo, qué necesita él, qué necesitamos los dos y, con la misma energía que comenzamos, seguir haciendo cosas grandes”.
Desde que inició ese distanciamiento, Espinoza dijo sentirse capaz de tomar más decisiones propias.
“Antes yo nunca tenía a nadie en mi camerino, siempre estaba solo. Ahora hay muchos amigos porque antes no había chance de que pasaran…”.
¿Te tenían dominado?, se le preguntó. “De alguna manera”, respondió el cantante.
Espinoza Paz aclaró que él no es un artista de alfombras rojas y acudir a celebraciones para recoger premios.
“Yo sufro. A mí me da pena”, puntualizó. “Me da vergüenza que me estén empujando, ya sea para quitarme de la tele, porque sigue no sé quien o que quiten a alguien para ponerme a mí [en las entrevistas]. Cuando en ocasiones gano un premio no sé que decir: me da vergüenza, así he sido siempre”.
Al intérprete lo han calificado de presumido y no querer “dar” sus canciones a artistas, que han logrado reconocimiento, para que las graben.
“Sé que mucha gente piensa que perdí el piso, pero yo estoy en todo menos en la artisteada ”, aclaró.
Espinoza Paz adelantó que está preparando un disco de corte ranchero con mariachi, un proyecto que ha tardado por las negociaciones con la disquera.
El ánimo del intérprete de Un hombre normal lo dejó ver en el escenario, donde bailó y utilizó colores muy alegres, llamativos que comparó con la felicidad que goza en estos momentos.
“Hace poco puse en Twitter: Quiero decirles que soy un hombre muy feliz, que estoy muy contento. Y la verdad estoy muy contento”, resumió antes de iniciar el concierto.