Obispo mexicano pide protección para migrantes centroamericanos
Desde la tribuna del Congreso de Coahuila, Raúl Vera instó a frenar abusos y extorsiones contra los indocumentados.
México.- El obispo defensor de derechos humanos Raúl Vera pidió desde la tribuna del Congreso del norteño estado de Coahuila reformas a la ley migratoria para proteger a migrantes centroamericanos de las extorsiones y abusos de las autoridades mexicanas.
Vera, quien fue invitado por los diputados para hablar el martes ante el pleno sobre el fenómeno migratorio, afirmó que los centroamericanos “son blanco de políticas injustas” y siguen siendo “víctimas de abusos y extorsiones de policías federales, estatales, municipales y hasta personal de Ferrocarriles Nacionales”.
“Esta mentalidad xenofóbica y de injusticia fomenta el maltrato a los pobres indocumentados que emigran por necesidad“, sostuvo Vera, quien lamentó que a nivel mundial México se distingue por las matanzas de migrantes.
El religioso fue invitado a hablar ante la posibilidad de impulsar desde este órgano legislativo local una reforma migratoria nacional que permita a los extranjeros el libre tránsito, estancia temporal, acceso a los servicios de salud y asesoría legal, en su trayecto para llegar a Estados Unidos.
El clérigo, quien fue mediador en el conflicto con la guerrilla zapatista en Chiapas, aseguró que con el enfoque de las políticas de seguridad se hace “creer que las migraciones son una problema y una amenaza”.
Afirmó que la política migratoria mexicana se contamina del tono subido “de la perspectiva de seguridad nacional con que se maneja el vecino país del norte, especialmente a partir de las caída de las torres de Nueva York”.
Cuando se endurecen las políticas migratorias de Estados Unidos, añadió, “México se comienza a convertir en el cementerio de migrantes“.
También lamentó a la vulnerabilidad en la que se encuentran los centroamericanos en territorio mexicano, donde “los matan o bien los entregan al crimen organizado para que se constituyan en delincuentes que más tarde son aniquilados”.
Vera, quien habló como ciudadano con un traje negro y no como obispo, recordó diversas declaratorias y disposiciones internacionales para proteger los derechos de los inmigrantes.
Este es la primera ocasión en la que un religioso llega a una tribuna legislativa para exponer su postura sobre el tema migratorio.