Desconectan a embarazada con muerte cerebral en Texas
La familia de Marlise Muñoz se oponía a mantenerla viva artificialmente
Austin – El hospital John Peter Smith de Fort Worth, en Texas, desconectó este domingo a Marlise Muñoz, una embarazada de 33 años con muerte cerebral, del respirador artificial que la mantenía con vida, tras una resolución judicial que dio la razón a la familia en el litigio abierto con el centro médico.
El hospital precisó, en un comunicado, que el marido de Muñoz, Erick, autorizó informar que su esposa fue desconectada del respirador a las 11:30 hora local.
El hospital, que forma parte de una corporación sanitaria pública y recibe fondos del condado, admite que las “últimas ocho semanas han sido difíciles” para la familia de la paciente, los médicos y la comunidad de la zona.
El consorcio siguió lo que creía que eran “las demandas de un estatuto estatal”, justifica.
Un juez, en cambio, consideró el pasado viernes que ese punto de la ley no es aplicable en casos de muerte cerebral -sí podría serlo en estados vegetativos o de coma, en los que el paciente sigue vivo-.
La resolución judicial se basó en que la paciente fue declarada con “muerte cerebral” y que es “inviable” que el feto nazca con vida, vista la afectación del embrión.
Marlise Munoz sufrió una embolia pulmonar a finales de noviembre pasado y fue declarada con muerte cerebral entonces.
La familia defendió desde el primero momento desconectarla del respirador, tanto por su opinión favorable como por la que Marlise, profesional de la sanidad, hizo explícita en conversaciones sobre el tema en vida.