Falta integridad
El año pasado fueron los jugadores del Atlas los que tuvieron que lidiar con el incumplimiento de salarios por parte de su directiva. En este Clausura 2014 le ha tocado a los futbolistas de Querétaro y Chiapas llegar a casa con las manos vacías en día de quincena.
Mientras que directivos se alzan el cuello diciendo que la Liga MX va por buen camino para algún día estar a la altura de ligas como las de Inglaterra y España, sus acciones muestran otra cosa. Es increíble que dos de los 18 equipos que compiten en México no puedan pagar sus nóminas adecuadamente.
Pero aún más increíble es que a los directivos de Chiapas y Querétaro y a los demás que se atrasan en los pagos no se les presione con más firmeza para que cumplan con el compromiso que tienen con sus jugadores.
La falta de integridad en el balompié azteca es alarmante. Varios jugadores de Chiapas manifestaron que su directiva los dejó en el olvido por dos meses. Los futbolistas recibieron el primer pago de 2014 a finales de febrero pero solamente fue por el mes de enero, con el mes de marzo iniciado a los jugadores aún se les debía su salario de febrero.
En Gallos Blancos la incertidumbre es peor aún ya que además de que constantemente no reciben sus salarios a tiempo existe la posibilidad de que el equipo desaparezca por completo. La crisis financiera que atraviesa el club es preocupante. El dueño de Gallos Blancos, Amado Yáñez, se encuentra siendo investigado por presuntos cobros indebidos de su empresa, Oceanografía, a Petróleos Mexicanos, razón por la cual sus recursos económicos han sido inhabilitados por las autoridades mexicanas. Por si esto fuera poco otro de los más poderosos accionistas del equipo, Martín Díaz Álvarez, también está siendo investigado por presumiblemente estar lavando dinero de actividades relacionadas con el crimen organizado.
La Federación Mexicana de Futbol no puede seguir haciéndose de la vista gorda, necesita tomar medidas severas para asegurarse que el jugador esté protegido.
