Joven arquero con sueños de grandeza

NUEVA YORK — Steven Ortiz, a sus 14 años, ha comenzado a hacer realidad su sueño de un día convertirse en futbolista profesional, como su papá.

Atrás quedó la decepción que sufrió cuando a los cuatro años un entrenador le dijo que no era arquero.

“Desde allí paré de jugar fútbol, no me gustó jugar en la cancha, así que como no me dejaron jugar de arquero, paré de jugar fútbol”, dijo Steven en entrevista telefónica desde Linden, New Jersey, donde reside. Entonces, se dedicó a la práctica del baloncesto.

Pero un buen día, a llegar a casa, su papá Manuel ‘El Chonto’ Ortiz, ex-defensa del Deportivo Cali, le da la noticia de que le había inscrito en otro equipo de fútbol. Entonces tenía 10 años y en ese nuevo club le preguntaron qué posición quería jugar. Ni corto ni perezoso les dijo que arquero.

“Esa fue la primera vez que en verdad jugué en un equipo”, indicó el menor nacido en Cali, Colombia, que llegó a Estados Unidos con su familia cuando tenía cuatro años.

Representando a los Red Bulls, Steven Ortiz se convirtió en el guardavallas más joven en ganar el concurso de búsqueda del mejor Portero, auspiciado por la empresa Allstate.

“No hay palabras para explicar la felicidad que tenía”, dijo el muchacho que cursa el noveno grado tras escuchar que era el ganador.

Steven no sólo está siguiendo los pasos de su papá Manuel, sino de un compañero de equipo: Alexander Soto, quien también a los 14 años, resultó el ganador de Sueño MLS del 2013, representando al D.C. United.

Ortiz fue compañero de Soto, primero en el equipo American United, de Elizabeth, N.J., y luego en TSF Academy.

“Este año todos los amigos de Alex fuimos al concurso, a ver si llegábamos lejos”, comentó sobre los ‘try-outs’ que tuvieron lugar en New Jersey para seleccionar a los finalistas, que iban por el premio grande en Carson, California.

Steven ganó el concurso nacional y ahora ya está en las divisiones inferiores de los Red Bulls. “El entrenamiento fue a muy alto nivel. Lo disfruté mucho”, dijo sobre su primera práctica con el equipo ‘energético’ la semana pasada.

A pesar de su corta edad, Steven está consciente de los sacrificios que han realizado sus padres para impulsarlo en el deporte. “Tener un niño como futbolista no es fácil”, destacó. “Mis padres siempre han estado allí”.

El joven portero señaló que las historias que le contaba su papá sobre los arqueros con los que él había jugado le motivaron mucho.

Y con su mamá se mostró agradecido porque ha sido la encargada del transporte, porque le ha tocado viajar a Virginia, Washington D.C., o puntos lejanos del estado de Nueva York.

“Por ese sacrificio yo trato de meter más ganas, para que un día, si Dios me lo permite, ir a jugar profesional y recompensar a mis padres y hacerlos felices”, manifestó.

No todo en la vida de Steven Ortiz ha sido color de rosa. Comentó que hace tres años, durante la escuela intermedia, vivió momentos muy difíciles cuando su papá batallaba contra el cáncer.

“Era muy difícil para mí, no me podía concentrar”, dijo. “Casi no lo vi por tres meses porque estaba en el hospital y yo no lo podía visitar; yo siempre le llamaba y le hablaba de los partidos”.

Esa etapa dura pasó. Hace unos cuatro meses los médicos le dijeron que ‘El Chonto’ Ortiz estaba libre de cáncer.

“Cuando salió del hospital, todo el verano entrené duro, hice el equipo de la ‘high school’ y él iba a mis partidos”, continuó. “Estaba feliz y a mí me gusta ver esa sonrisa en la cara de mi papá, que esté feliz porque estoy haciendo lo mismo que él hizo cuando era joven”.