5 cosas que debe hacer antes de jubilarse
En la planeación está la clave para que la jubilación sea un éxito
Tras décadas de trabajar con esmero y ahorrar disciplinadamente, al fin llegó la hora de jubilarse. Si se está preparando para jubilarse este año, tenga presente estas cinco tareas que incluyen desde cómo gastar su dinero hasta cómo invertir su tiempo.
Elabore un presupuesto y un plan de gasto
Antes de jubilarse, determine una suma de dinero de la que pueda prescindir regularmente. Esto lo ayudará a comparar los ingresos que espera tener después de trabajar con sus gastos cotidianos previstos y le dará un panorama de cuánto necesita para vivir cómodamente durante su jubilación.
Según las estimaciones de los especialistas, la mayoría de los jubilados necesita, como mínimo, un 70% de los ingresos que percibían antes de jubilarse para mantener el nivel de vida al que estaban acostumbrados. Las personas de ingreso más bajo pueden necesitar un 90% o más.
Evalúe la posibilidad de ahorrar dinero para prepararse ante eventuales gastos de emergencia que pueden no estar contemplados en su presupuesto normal para la jubilación, por ejemplo, costos de atención médica imprevistos, reparación de vehículos o mantenimiento de la vivienda.
Intente vivir con el presupuesto esperado durante al menos seis meses antes de jubilarse: poner a prueba su plan también lo ayudará a identificar falencias o gastos que se le pueden haber pasado por alto.
Determine en qué momento inscribirse en Medicare y empezar a recibir los beneficios del Seguro Social
Actualmente, las personas pueden inscribirse en Medicare a los 65 años. Es importante que se afilie a Medicare tan pronto como reúna los requisitos para hacerlo, o bien que empiece a enviar los documentos necesarios con tres meses de antelación.
Si no se inscribe antes de los 65 años, es posible que deba pagar cargos y que se le apliquen penalidades. Evalúe las primas, los copagos y el coseguro para ayudar a estimar cuánto puede que tenga que pagar de su bolsillo.
Es posible que Medicare no cubra todos los gastos de atención médica. Lea las pólizas complementarias del programa, conocidas como Medigap, que venden las compañías de seguro privadas. Una póliza de seguro de cuidados a largo plazo también puede ayudarlo a pagar cuidados paliativos, servicios de asistencia y demás gastos que pueden no estar incluidos en la cobertura de Medicare.
La determinación del momento a partir del cual empezar a recibir los beneficios del Seguro Social puede variar según su situación. Muchos jubilados comienzan a recibir los beneficios no bien adquieren el derecho a hacerlo, ya que necesitan el dinero de inmediato para complementar los ingresos durante la jubilación; otros demoran más.
Tomar fondos del Seguro Social antes de cumplir la edad oficial para jubilarse puede reducir sus beneficios. Si nació entre 1943 y 1959, la edad oficial para jubilarse es a los 66 años. Si nació en 1960 o después, a los 67.
Si no necesita los fondos, le conviene postergar los beneficios hasta después de cumplir 62 años, edad a partir de la cual podrá recibir beneficios anticipados (que son inferiores a los que se reciben a la edad oficial para jubilarse). Así, el importe de sus beneficios puede incrementar un 8% al año. Si está casado, es posible que pueda cobrar beneficios conyugales, que se determinan en función de los antecedentes laborales de su cónyuge. Consulte a un asesor financiero para determinar el mejor enfoque a adoptar.
Transfiera los fondos de su plan 401(k) a una cuenta de jubilación individual (IRA)
Acceder a sus ahorros durante la jubilación puede ser más difícil si conserva su dinero en el plan 401(k) de su empleador. Transferir su dinero a una cuenta IRA facilita el acceso y las distribuciones –en ocasiones, incluso una transferencia mensual a su cuenta bancaria, una especie de salario mensual sustituto-.
Transferir sus ahorros a una cuenta IRA también puede ayudarlo a ahorrar dinero, ya que muchos planes 401(k) cobran gastos administrativos al retirar los fondos. Colocar sus ahorros en una cuenta IRA administrada por su actual asesor financiero le permite optimizar la planificación de las distribuciones, ya que todos los activos estarán en un mismo lugar.
Elabore un plan de inversión a largo plazo
El temor a perder sus ahorros no debe impedir que aplique estrategias de inversión en acciones de crecimiento para compensar los aumentos de precio.
Muchos jubilados se aferran a carteras de inversión en bonos, pero con el paso del tiempo, la inflación puede percudir el poder adquisitivo del rendimiento de esas inversiones. En ocasiones, una cartera bien diversificada que incluya una proporción equilibrada de acciones y bonos puede ayudar a que sus ahorros le alcancen para toda su jubilación (la cual puede extenderse durante treinta años). Controle sistemáticamente la asignación de sus inversiones; puede cambiar con el tiempo, dependiendo de su edad, los objetivos que se plantee para la jubilación y las circunstancias financieras.
Los impuestos inciden en la forma de gastar sus activos durante la jubilación. Posiblemente, la mejor estrategia sea recurrir primero a los activos gravables (por ejemplo, las utilidades obtenidas por la venta de inversiones) y dejar que los activos con diferimiento de impuestos, por ejemplo, los fondos en cuentas de jubilación, sigan creciendo y capitalizándose.
Nota: La mayoría de los planes con ventajas impositivas exigen que los participantes comiencen a retirar las distribuciones mínimas obligatorias, a más tardar, a los 70 años y medio.
Decida cómo invertir su tiempo
Este aspecto cumple un rol trascendental -y hasta a veces sorprendente- a la hora de determinar su situación financiera durante la jubilación. Sus planes y gastos variarán en los meses venideros, dependiendo de sus intereses, pasatiempos y actividades.
Por ejemplo, algunos jubilados optan por no alejarse del hogar y pasar más tiempo con sus familiares. Otros viajan alrededor del mundo. Saber cómo asignará su tiempo libre y su dinero es muy útil para ajustarse al presupuesto que elaboró para esa etapa de la vida.
La jubilación puede ser costosa, en especial, si carece de un plan.
– Derec Mieden/AdviceIQ