Ataques en París: las incógnitas que persisten tras una semana
Siete días después de los atentados que causaron la muerte de 129 personas y cientos de heridos en la capital francesa, las autoridades siguen tratando de atar cabos sobre el complot y su impacto internacional
En París se siguen depositando flores y mensajes cerca de la sala de conciertos Bataclan donde murieron 89 personas. Crédito: BBC
Francia y sus países vecinos están en un alto nivel de alerta tras los ataques del pasado viernes en París, que causaron la muerte de al menos 129 personas y cientos de heridos.
El presidente François Hollande dice que Francia está “en guerra” con el autodenominado grupo radical Estado Islámico (ISIS) y las autoridades todavía buscan a algunos de los implicados.
A una semana de distancia, BBC Mundo ofrece un resumen de la situación, analizando también el impacto internacional de los ataques y las lecciones que las autoridades están tratando de extraer.
¿Tienen las autoridades la situación bajo control?
Es demasiado temprano para decirlo. Sin embargo, hubo un gran avance este jueves al confirmarse que el supuesto cerebro de los ataques, Abdelhamid Abaaoud, resultó muerto en un operativo policial en el barrio de Saint-Denis, en el norte de París.
Las huellas dactilares del militante de EI fueron identificadas formalmente de restos encontrados en el apartamento de Saint-Denis donde el miércoles un grupo de extremistas opuso una férrea resistencia a las fuerzas de seguridad.
Las autoridades francesas están a la caza de otro de los principales sospechosos, Salah Abdeslam, quien alquiló uno de los automóviles usados en los ataques. Su hermano, Brahim, se inmoló en el bulevar Voltaire durante los sucesos del viernes.
Los medios de comunicación franceses reportaron que nueve extremistas participaron en los ataques y que siete de ellos murieron el viernes. Es por lo tanto posible que el otro atacante –además de Salah Abdeslam– aún esté prófugo.
También se especuló que los atacantes muertos o detenidos en Saint-Denis planificaban un atentado en el distrito financiero parisino de La Défense y en el aeropuerto Charles de Gaulle de la capital francesa. Sin embargo, no se ha mostrado ninguna evidencia al respecto.
La policía podría extraer más información de dos hombres que fueron arrestados en el apartamento en Saint-Denis y otras seis personas detenidas en las cercanías.
¿Cómo se orquestó el complot?
Las autoridades francesas creen que la rama de ISIS en Siria ordenó lanzar los ataques y que la operación se planificó en Bélgica, probablemente en Molenbeek, un municipio de Bruselas conocido por su alto desempleo, problemas sociales y mezcla de población inmigrante.
ISIS dijo que sus militantes atacaron París como castigo a los “cruzados” de Francia por sus bombardeos contra “musulmanes en las tierras del Califato”, su descripción para el territorio de Irak y Siria.
Agregó ISIS que el ataque estaba “dirigido a la capital de la prostitución y la obscenidad, el portador de la bandera de la Cruz en Europa: París”.
Muchos de los residentes de Molenbeek son árabes y la zona ha sido vinculada a la presencia de yihadistas.
El jueves la policía belga arrestó a nueve sospechosos cerca de Bruselas, incluyendo a siete que supuestamente conocían a Bilal Hadfi, uno de los atacantes suicidas.
Por lo menos tres de los automóviles alquilados en Bélgica fueron utilizados en los ataques: un Seat negro, un Volkswagen Polo y otro Golf.
Los investigadores sospechan que los atacantes utilizaron refugios seguros en Saint-Denis, Bobigny y Alfortville, todos en la región de París.
Sin embargo, no se sabe exactamente cuándo se reunió el grupo para lanzar los ataques y falta aclarar otros elementos del complot.
Los investigadores estudiarán los registros telefónicos y analizarán las armas decomisadas para obtener más pistas.
Por el momento se cree que tres grupos de extremistas bien organizados y coordinados participaron en el ataque conjunto del 13 de noviembre, utilizando rifles de asalto Kalashnikov y cinturones explosivos.
Los militantes – cuatro de ellos de ciudanía francesa – efectuaron los ataques en tres lugares principales: en las afueras del Stade de France y, en el centro de París, en abarrotados bares y restaurantes y en la sala de conciertos Bataclan.
Tres detonaron sus cinturones explosivos cerca del estadio durante un partido de fútbol entre las selecciones de Francia y Alemania. Quizás tenían pensado entrar en el estadio y sus intentos frustrados.
Bataclan fue el lugar más sangriento con 89 personas perdiendo la vida.
Los ataques probablemente tomaron meses de entrenamiento, señaló el experto belga sobre extremismo islámico, Pieter Van Ostaeyen.
Evidentemente, el plan fue ideado para provocar el mayor número de muertos de manera aleatoria. Los objetivos eran lugares concurridos donde los jóvenes se estaban divirtiendo.
¿Por qué no fueron detenidos los atacantes?
Los servicios de seguridad franceses y sus socios europeos serán objeto de escrutinio para ver si debieron haber recogido información de inteligencia sobre los ataques y haberlos impedido.
Por ejemplo, Van Ostaeyen le dijo a la BBC que dos de los combatientes belgas de ISIS advirtieron en un video en febrero que atacarían Francia.
Y la seguridad fue reforzada en Francia después de los ataques de extremistas islámicos en París contra el personal de la revista Charlie Hebdo, una agente policial y un supermercado judío. Tres pistoleros mataron a 17 personas antes de resultar muertos a manos de la policía.
Sin embargo, los expertos de seguridad dicen que es muy difícil impedir ataques como el más reciente en París con grupos suicidas atacando blancos fáciles indiscriminada y simultáneamente.
Hay una vigilancia de las comunicaciones conocidas entre los yihadistas, ya sea a través de teléfonos móviles o la internet, pero la creciente y ampliamente disponible fuerte encriptación de datos dificulta ese seguimiento.
En Francia y Bélgica hay ahora una intensa presión para hacerles seguimiento a los sospechosos de ser yihadistas porque algunos de los atacantes pasaron tiempo en Siria con ISIS.
Entre las propuestas se incluye: cárcel o arresto domiciliario para yihadistas que regresen de Siria, despojar de su nacionalidad a los más violentos y colocar brazaletes electrónicos en sospechosos.
Algunos críticos también dicen que los yihadistas cruzan demasiado fácilmente las fronteras en la zona de libre circulación europea Schengen. Apenas ahora se han introducido controles rutinarios en la frontera entre Bélgica y Francia.
Un mayor intercambio de inteligencia entre la policía antiterrorista de Francia y Bélgica podrían haberlos alertado de la inminente amenaza a París.
¿Qué tan importante es la conexión belga?
Mucho. Aparentemente Molenbeek era el centro de operaciones, pero hubo otras conexiones belgas.
Abaaoud se jactaba de contribuir a organizar células de EI en Verviers, en el este de Bélgica. La policía allanó allí en enero un refugio seguro de los extremistas, pero Abaaoud consiguió escaparse.
Y ministros del gobierno belga reconocen que más se pudo hacer para enfrentar el extremismo islámico en Molenbeek.
Mehdi Nemmouche, un yihadista franco-argelino acusado de asesinar a cuatro personas en el Museo Judío de Bruselas el año pasado, también estuvo un tiempo en Molenbeek.
Bélgica ha sido el país de la Unión Europea desde donde más yihadistas, per cápita, han salido a unirse a ISIS en Siria e Irak.
Al ser un país altamente federado, Bélgica tiene varias fuerzas policiales y su coordinación es a veces un problema.
En ocasiones información clave de inteligencia no se comparte, no solo dentro de Bélgica sino con socios europeos como Francia, apunta el experto holandés Liesbeth van der Heide, del Centro sobre Terrorismo y el Contraterrorismo de la Universidad de Leiden.
La Unión Europea no tiene una base central de datos sobre información de inteligencia relacionada con los yihadistas, pero ahora están surgiendo llamados para que se conforme.
¿Cómo perdió Europa el control de sus fronteras?
La masacre de París aumentó los temores sobre el acuerdo Schengen y sobre las fronteras externas de la Unión Europea.
La libertad de movimiento es un valor esencial apreciado de la UE, pero significa que, tras ingresarla, violentos yihadistas y otros criminales pueden cruzar sus fronteras internas fácilmente.
El acuerdo Schengen existe en una Europa en donde las autoridades nacionales aún guardan celosamente la inteligencia que afecta a la seguridad de su respectivo país.
Y en cuanto a las fronteras externas de la UE, la llegada de inmigrantes –muchos de ellos refugiados sirios– ha significado que han estado bajo una gran presión este año.
Grecia y Italia, países que deben patrullar largas fronteras marinas, están recibiendo ayuda de la UE para monitorear a los inmigrantes que llegan. Sin embargo, eso no es suficiente.
Más de 650.000 llegaron a las costas europeas este año y se teme que algunos yihadistas se hayan infiltrado.
Uno de los atacantes suicidas de París tenía un pasaporte sirio falso con el nombre de “Ahmad al-Mohammed”. Funcionarios griegos dijeron que el pasaporte había sido registrado el pasado mes en la isla de Leros.
¿Se repetirán los ataques de París en Francia o en otro lugar?
Las medidas de seguridad se han extremado ahora en Francia. Bajo el actual estado de emergencia, la policía francesa tiene mayores poderes para hacer inspecciones y detener sospechosos.
Sin embargo, el ministro del Interior de Francia, Bernard Cazeneuve, advirtió la necesidad de que las naciones de la UE aumenten los controles en las fronteras externas.
“Es urgente que Europa se organice conjuntamente, se defienda contra la amenaza terrorista”, señaló.
Francia también respondió bombardeando a los militantes de ISIS en Siria e Irak. EE.UU. y sus aliados, además de Rusia, también están atacando a ISIS.
De manera tal que persiste un verdadero riesgo de que EI intente llevar a cabo más ataques dentro de Europa o en otro lugar.
Las autoridades francesas advirtieron que ISIS podría usar armas químicas o biológicas en un futuro ataque. A los servicios de emergencia franceses se les suministrará sulfato de atropina, un antídoto contra el gas nervioso.
