Elizabeth Smart testifica en juicio contra Medrano
Isidro Medrano García es acusado de secuestrar la hija de su exnovia, violarla y mantenerla rehén por 10 años
Elizabeth Smart, una joven mujer que se convirtió en la cara de los secuestros infantiles cuando un hombre la sacó de su casa en Utah y la retuvo por varios años, testifica hoy ante una corte del condado de Orange para determinar si podría actuar como testigo experto en el caso de un hombre acusado de raptar, violar y retener a la hija de su pareja por una década.
Smart, de 29 años, tenía tenía 14 años cuando, en junio de 2002, Brian David Mitchell la sacó de la cama a punta de cuchillo ante los ojos entre abiertos de su hermana, que con 9 años, se convirtió en la única testigo del suceso, ocurrido en Salt Lake City, Utah.
La pequeña fue la que escuchó una voz familiar que con el tiempo logró reconocer como la voz de aquel vagabundo de pelo largo y barba hasta el pecho que su madre contrató por lástima para hacer arreglos en la casa.
“No hagas ruido. Sal de la cama y ven conmigo o mataré a toda tu familia”. Aquélla fue la primera gota con la que el captor comenzó a lavar el cerebro de Elizabeth. Unas horas después, tras caminar varios kilómetros, aparecieron en un camping donde les esperaba la mujer de Mitchell, la también encarcelada Wanda Eileen.
Oficiaron una ceremonia mormona en la que el secuestrador ‘contrajo matrimonio’ con la adolescente. A partir de ese momento y durante nueve meses, Mitchell no dejó de abusar de ella a diario por “revelación de Dios”. Así hasta que en marzo de 2003, fue vista caminando con sus captores a tan sólo tres kilómetros de su casa. Mitchell y Eileen fueron detenidos por asalto, secuestro y acoso sexual, entre otros cargos.
Smart es ahora una comentarista en casos de rapto y retención de menores.
Es por eso que sus conocimientos sobre el tema podrían ser muy útiles para los fiscales en el juicio que se le sigue a Isidro Medrano García, quien está acusado de drogar y secuestrar a la hija de 15 años de su pareja y retenerla por una década, tiempo durante el cual se casó con ella y tuvieron una hija.
La presunta víctima de Medrano García, ahora de 26 años, se presentó en 2014 ante la Policía de Bell Gardens y dijo a las autoridades que había sido secuestrada por el novio de su madre, violada y mantenida rehén por 10 años.
García, de 42 años, quien trabajaba en la limpieza y operando maquinaria en una fábrica de Bell Gardens, donde vivía con la mujer, — que ante la mirada de los vecinos parecía no tener ningún problema — enfrenta cargos que le significarían pasar el resto de sus días en prisión.
“Este es un caso de manipulación”, sentenció la fiscal del caso, Whitney Bokosky, ante el jurado en sus declaraciones de apertura la semana pasada.
Es el jurado el que decidirá si en realidad es un caso de secuestro y violación continua por una década, o bien, un amor a escondidas, como han indicado otros.