‘Estás enfermo por ser gay’, le dicen a hispano en hospital
El maltrato sufrido lo lleva a hacer una denuncia pública y analiza presentar una demanda legal contra el nosocomio, un inmigrante mexicano
“Tú estás enfermo por ser gay. Dios no aprueba tu estilo de vida”, le dijo presuntamente la enfermera Anu Varguese a Salvador Martínez, un inmigrante mexicano de 27 años mientras se encontraba internado en el Arrowhead Regional Medical Center en Colton, víctima de una severa meningitis que casi lo mata.
“Yo soy una buena persona, soy católico, nunca he dañado a nadie, nunca he tomado nada de nadie, ayudo a mi familia y no merezco estar aquí por ser gay”, alega que le respondió Martínez mientras que su esposo Ivan Resendez, testigo del incidente, le pidió a la enfermera salirse de la habitación.
“Yo puse una queja en los días siguientes porque la experiencia lo afectó tanto que tuvieron que darle pastillas para la depresión”, comentó Resendez.
El Caso
La pesadilla para esta pareja comenzó el 1 de enero cuando Martínez fue llevado de emergencia al Centro Médico Regional Arrowhead, presa de intensos dolores de cabeza y vómito.
“Todo lo que comía, así tomara agua, lo vomitaba. El doctor me mandó a mi casa con un diagnóstico de ansiedad, pese a que le dije que yo no me sentía ansioso ni deprimido”, cuenta Martínez.
“Al tomarme el medicamento Xanax me sentí peor. Me fui al baño y caí al piso desmayado”, dice.
Su condición comenzó a empeorar. “Pasó ocho días con vómitos. Yo le escribí al presidente del área de medicina de emergencia del mismo centro médico, Rodney Borger”, narra Resendez. “No sabíamos qué hacer. Salvador tiene sólo Medi-Cal de emergencia. Borger me respondió que lo lleváramos de nuevo al hospital”, recuerda.
Fue entonces cuando les dijeron que no era ansiedad sino meningitis micótica lo que Martínez tenía y que podía morir.
Pierde la vista
“Una semana después de haber ingresado al hospital comenzó a dejar de ver y le programaron una cita con la oftalmóloga Mary Lim”, dice Resendez.
“Durante la consulta, Salvador comenzó a vomitar. Ella también vomitó. Le dijo que su vómito era asqueroso. ‘¿Qué comiste anoche?’ le preguntó. La oftalmóloga continuó haciendo como que iba a vomitar y ya no quiso continuar con el examen porque dijo que el vómito era demasiado repugnante. Una situación que hizo sentir muy incómodo a Salvador”, expone.
“Después de eso, la doctora se ha negado a hacerle un examen y quiere que espere dos meses porque así lo dice la administración”, cuenta Resendez.
Martínez pasó un total de 47 días en el hospital antes de ser dado de alta.
“Le han dicho que puede tomarse hasta dos años para que recupere la visión”, cuenta Resendez.
Resendez entregó una copia a La Opinión de la carta enviada al Hospital en la que detalla todas los problemas que sufrió su compañero.
“Lo que queremos con esta denuncia pública es crear conciencia y evitar que se discrimine por ser gay a un paciente que está muy grave, muriéndose con una infección en el cerebro”, dice Resendez.
La pareja estudia la posibilidad de entablar una demanda legal contra el nosocomio por negligencia médica en el diagnóstico, discriminación por parte de la enfermera y maltrato a manos de la oftalmóloga.
Martínez, mejor conocido por su nombre artístico de Gary Ferrer, ha sido fotógrafo de diseñadores como Adán Terríquez muy reconocido en Los Ángeles, y ha capturado con su lente imágenes para portadas de discos de algunos famosos. Es además maestro de zumba. Con la ayuda de sus vecinas y alumnas, ésta semana regresó a sus clases en Colton.
“Ya puedo mirar siluetas y colores. Y bailar me levanta el ánimo”, comenta el muchacho quien aún está en proceso de recuperación.
La Opinión contactó al hospital en busca de un comentario sobre la denuncia de parte de Martínez y Resendez. Hasta el momento no ha habido respuesta.